Nación
La Secretaría de Gobernación (Segob) dio a conocer que en coordinación con autoridades de Baja California, logró contener a un grupo de casi 500 migrantes que de manera violenta intentaron cruzar la frontera con Estados Unidos en el paso fronterizo de El Chaparral, en Tijuana.
A través de la Segob, el Gobierno de México informó que pese a la magnitud de esa situación y conforme a su política interna de respeto a los derechos humanos y a la no criminalización de la migración, México no desplegará fuerzas militares para enfrentar este problema.
No obstante, indicó que reforzará los puntos fronterizos donde las personas irrumpieron en su intento por ingresar ilegalmente al vecino país.
En un comunicado, la dependencia reiteró que a través del Instituto Nacional de Migración se procederá a deportar inmediatamente a las personas plenamente identificadas que participaron en los hechos violentos.
Señaló asimismo que dichos actos de provocación, lejos de ayudar a sus objetivos, atentan contra el marco legal migratorio y pueden derivar en incidentes graves en la línea fronteriza. Respecto a la reacción de las autoridades estadounidenses, afirmó que no se reportan heridos por arma de fuego.