Por crisis ahora sale Goodyear de Venezuela

La firma Goodyear en Venezuela paralizó su planta de operación al confirmar que era “imposible” producir en las actuales condiciones económicas y bajo las sanciones impuestas por Estados Unidos.

La medida tomó por sorpresa a unos 400 trabajadores que acudieron a la planta a unos 150 kilómetros de la capital y recibieron un documento que informaba de la suspensión y de la entrega de 10 neumáticos como parte de su liquidación por el cierre, informó Jorge Rodríguez, representante sindical de la empresa.

Goodyear, que tiene su sede en Ohio, Estados Unidos, a través de su vocero, Eduardo Arguelles, confirmó la paralización de la producción de neumáticos.

“Nos encontramos con la desagradable sorpresa de que la planta (...) estaba cesando operaciones aquí en los Guayos (Carabobo, centro), nos cayó de imprevisto la noticia”, dijo el sindicalista Luis Lovera, quien explicó que la firma puso un comunicado en sus puertas informando su decisión.

Este texto, que los trabajadores han puesto a circular en redes sociales, señala que “a partir de hoy, C.A. Goodyear de Venezuela ha sido forzada a cesar sus operaciones en su planta localizada en Valencia, estado Carabobo” y le informa a sus trabajadores que han sido pagadas sus prestaciones sociales, bonos y otros beneficios.

Sin embargo, Lovera aseguró que no han recibido los mencionados pagos y que la información del cese de operaciones les ha tomado por sorpresa.

Lovera dijo que la producción actual de planta se encontraba entre mil 500 y mil 900 neumáticos por día, pese a tener capacidad para 10 mil 500, es decir, operaba en un 10 por ciento de su capacidad.

El sindicalista también indicó que aunque en la empresa “tenía materia prima”, también había “problemas” para la producción por un aceite que les proporcionaba la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), hoy sumergida en una profunda crisis.

La planta en Carabobo es la única que Goodyear operaba en Venezuela y, de acuerdo con información de los trabajadores, son más de mil empleados los afectados.

“Nuestro objetivo había sido mantener las operaciones, pero las condiciones económicas y las sanciones de los Estados Unidos han hecho esto imposible”, apuntó la empresa. En 2018