Cubierto el primer paso

“El béisbol es analogía de la vida misma” Perseverar, intentar una y otra vez sin desmayo, más aún, con mayor fortaleza cada vez es clave para ganar un campeonato. Casi nadie triunfa al primer intento, hay aprendizajes que, a veces son amargos, quizá injustos, pero necesarios para que el título sea más dulce y permanente.

Corriendo a primera base. Con sobresaltos en el camino, claroscuros, pero con el #TeamWork como constante, la Selección Mexicana de Béisbol logró calificar a 2ª ronda en el Clásico Mundial de la especialidad y no sólo eso, sino que logró conquistando el 1er lugar de su grupo (el “C”) en un resultado que satisface las expectativas generales y que refleja el trabajo de planeación iniciado en la oficina desde la designación de Rodrigo López como el responsable en el escritorio, pasando por la designación de roster y mánager, así como el trabajo que efectuaron éstos durante estos 4 juegos iniciales, donde desde la distancia se percibe como el grupo de peloteros se ha integrado en un equipo, dando como resultado este récord de 3-1 que trae un “pilón” adicional con la nueva victoria sobre Estados Unidos (actual campeón del torneo) a quienes se ha vencido en 3 de 4 ocasiones en la historia del torneo.

Robando segunda. No fue fácil el inicio, por el contrario, estuvo del lado descorazonador cuando el sábado Colombia levantó la mano al imponerse en extrainnigs a México. Golpe que cimbró de cabeza a pies a todo el universo beisbolero nacional, no sólo por el standing, sino por la percepción de que “algo le faltaba” a la novena y el camino se ponía muy cuesta arriba.

Ese sábado se conjuntaron la ausencia del hit empujador, así como error que abrió la puerta a la carrera de la diferencia y que trajo a la mente varias situaciones históricas similares que ha tenido, no sólo el beis o el deporte nacional, sino en general nuestra nación, con indefiniciones o malas ejecuciones en momentos clave, con los famosos “que hubiera pasado” o “por poquito”, ese mal fario en el que poco a poco se ha venido trabajando para cambiar aquello de “lo más probable es que perdamos” “nos va a ir mal” al “venimos a ganar” “estamos preparados”, pero el debut en el Clásico Mundial trajo un poco de esas nubes negras que queremos erradicar y, felizmente, Novena México lo hizo.

Camino a la antesala. El domingo vino juego contra EEUU ése donde pendía de un hilo la eliminación y la respuesta de la tropa liderada por Benjamín Gil fue la requerida para regresar. Cuadrangulares de Joey Meneses y pitcheo sólido abrieron la brecha para vencer al poderoso escuadrón norteamericano, que, dicho sea de paso, es favorito al título y así, con mayor autoridad que el Dios del Viento, Eolo, los mexicanos enviaron las sombrías nubes a volar. Al igual que un día antes, lo más relevante no era el dato de la victoria, sino la recuperación e incluso fortalecimiento de la confianza.

El mensaje de Gil a sus peloteros al concluir el juego fue más que directo: “no se ha ganado nada, el objetivo es festejar el 21 de marzo (día de la final) y lo podemos lograr” discurso de esos relevantes, que no impidieron festejar, pero sí, mantener los pies sobre la tierra.

Barridos en home. Ante Gran Bretaña vino más sufrimiento del esperado con victoria (2-1) no sin sobresaltos ni sustos, pero con ese #TeamWork, que puso como héroe a un pelotero que juega en LMB y que entró de última hora al roster, Alexis Wilson, además claro, de los lanzadores y un día después, en el cierre de hostilidades del grupo, llegó duelo contra Canadá, con más recuerdos de pelota caliente transformada en duelo de bofetadas que en la paridad de éxitos entre sí, mismo que en esta ocasión fue del Tri Beisbolero, que con brazos, bats y guantes dio golpe de autoridad para derrotar a nuestro otro socio del T-MEC, con actuación memorable de Randy Arozarena, así como nuevamente el pitcheo, manejado magistralmente por Benji Gil, que consolidó una muy buen primera ronda, para, con liderazgo ganado, enfilar a Miami para enfrentar a un rival tradicional de Serie el Caribe, que cuenta con una pléyade estelar en su roster: Puerto Rico.

Jugada en revisión. Nada se ha ganado, cierto, pero se ha mostrado potencial para seguir avanzando y es magnífica noticia estar en cuartos de final, ahí donde hay que seguir dejando todo en el diamante y en el apoyo, con la confianza que el #TeamWork logra que un equipo integrado derrote a los esfuerzos individuales y esa es la fuerza de México, además claro que es momento que algunos bateadores que están “con gafas obscuras puestas” levanten la mano para apoyar la producción de carreras y por supuesto que el liderazgo, tanto de Rodrigo López en la directiva como Gil en el timón se hagan más que nunca presentes para que, en la suma de todo lo anterior, este momento deje de ser un sueño y sea una realidad ver al representativo de nuestra pelota en el Olimpo Internacional de los 4 primeros ¿es posible? Sí, pero se requiere trabajar fuerte y preciso este viernes, porque los éxitos no caen del cielo, ni por popularidad.

Toque de Sorpresa. ¿No le dieron ganas de festejar en el Ángel de la Independencia el domingo y el miércoles? Lo malo fueron los horarios de ambos juegos, pero han sido días de amplias sonrisas, que esperamos continúen de aquí al término del Clásico Mundial.

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@EdmondStar16