Dune

La semana anterior hablamos de la versión que nunca llegó a filmarse. Ahora vayamos a la que, para muchos, fue la que le robó el lugar y para tantos, hubiera sido mejor no haber sido nuca filmada. Dune de David Lynch.

La versión de Lynch es problemática desde su concepción: la ciencia ficción había tomado ya un lugar preponderante después de que StarWars llegara al cine y resultara un éxito descomunal, lo mismo se esperaba con Dune: una saga de películas que llegará a nivel masivo y llenará a los productores de dinero. Nada más fuera de lo esperado.

El planeta Arrakis es el centro neurálgico de una galaxia que no es propiamente la nuestra. En este planeta abundan 3 cosas: desierto, gusanos gigantes y melange. Arrakis es un planeta completamente desértico en donde nunca llueve, el agua se exporta, así como los recursos materiales; su moneda de cambio para con los otros planetas es la melange, una especie de droga psicotrópica que funciona como un LSD, generando sensaciones y apertura sensorial a la cual uno se vuelve adicto. Una vez que esta melaza entra en el cuerpo, se vuelve de vital importancia para el mismo, solo se produce en Arrakis.

Lo anterior es el primer error en el guion del filme de Lynch , ya que, o se describe con algún personaje mirando a cámara, o se describe bajo los pensamientos con voz en off de algún otro, nunca de manera orgánica, y lo cual dificulta entender no solo los aspectos básicos, como lo ya narrado, si no la trama en general. Nunca se entiende quien es el emperador, ni el porque de la importancia política del melange o los aspectos filosóficos de la misma.

Suponer que al estar basado en una novela éxito de ventas a nivel mundial significaría que la gente entendería la trama fue una suposición poco asertiva. El filme fue un fracaso en taquilla, los efectos especiales se veían arcaicos incluso para 1980, las actuaciones están disparejas y aunque se nota que el reparto está haciendo su mejor trabajo también se nota que ninguno estaba contento con el resultado.

La obra de Herbert es extensa, compleja y profunda, el filme de Lynch en un primer momento duraba cerca de cuatro horas, y fue reducido a menos de dos. El presupuesto fue poco para esta epopeya espacial, y a eso hay que agregarle que el productor Dino De Laurentis nunca dejo trabajar David Lynch, el resultado fue uno de los fracasos más estrepitosos en taquilla y por poco el fin de la carrera de su director.

Vale la penas verse, claro, es un filme que a pesar de sus fallas ha significado un hito cierto culto a su alrededor.

Se encuentra en la plataforma de HBO.