El entusiasmo de Monreal

En efecto, no ha sido sencillo sobreponerse de un golpe tan duro como lo ha vivido Monreal luego de que, el propio presidente, no lo nombrara en Palacio Nacional. Pero tampoco eso ha sido un impedimento pues el zacatecano tiene méritos y credenciales- aspectos que deben reconocer- quienes lo han tratado de minimizar. De hecho, el pasado histórico de Ricardo habla de una verdadera lucha que ha librado en distintas trincheras.

No ha sido la primera ni será la última dado que Ricardo Monreal es un político acostumbrado a pelear contra la propia adversidad. Pasó en su natal Zacatecas donde mostró su capacidad a pesar de arrancar con una mínima posibilidad de triunfo en la gubernatura en aquella época.

Y sin embargo ganó; se consolidó como uno de los primeros gobiernos de izquierda en el país siendo que tuvo todas las condiciones políticas en su contra. Y esa capacidad la encontramos hoy en día en la imagen de Ricardo Monreal aunque más fortalecido. No cabe duda que, el líder de la fracción de Morena en el Senado, ha madurado manteniendo un nivel de competencia en la que ha ganado terreno a pesar de las circunstancias de iniquidad que da la sensación de lo que pasa- ya que existe un tono de favoritismo hacia otros perfiles.

Pero Ricardo Monreal hace posible lo imposible, como cita la socióloga chilena, Marta Harnecker en una de sus obras. En cualquier momento puede dar un brinco a la cima de las preferencias en Morena; hay señales y evidencias a través de estudios demoscópicos que otorgan un crecimiento en las últimas encuestas. De hecho, hace un par de semanas se destacó su ascenso al tercer lugar a sólo 10 puntos del segundo sitio.

En otras palabras, le pisa los talones muy cerca al segundo lugar. La razón es sencilla: paradójicamente ha crecido porque la sociedad ha calificado como una desventaja las condiciones inequitativas que han tenido con él. Al final de todo, no hay cancha pareja en la competencia interna de Morena; tuvo que ser la propia presión de la población civil y la firmeza que mostró Monreal luego de la exclusión que sufrió en Toluca.

No hay que olvidar que, esa acción, le trajo críticas y señalamientos al dirigente nacional de Morena. Por ello consideró necesario convocar al coordinador de los senadores a Coahuila a un evento de unidad. Aunque realmente consideramos que lo que pasó- fue una intervención del presidente ante la amenaza de una ruptura interna de la expresión guinda- ya que había manifestaciones, en distintos puntos del país, de pugnas por lo que provocó una mala decisión del CEN.

A estas alturas, ya nos demostró la capacidad que tiene Ricardo Monreal para sobreponerse, incluso, con todas las condiciones en su contra. De continuar por esa dirección no tengo ninguna duda que, de un momento a otro, el coordinador de los senadores de Morena estará compartiendo la cima de las preferencias de manera contundente.

Tiene mucho ánimo y está echado para adelante. Su impulso y la motivación son impresionantes; cualquier otro político ya se hubiera rendido ante la presión en su contra; sin embargo, eso fortalece más a Monreal pues sus aspiraciones que ha ganado a pulso lo convierten cada vez más en el próximo sucesor del presidente Obrador- porque a diferencia de los demás aspirantes- lo respalda la historia política y la lucha democrática del país de la que es precursor.

Por ello el entusiasmo de Monreal es muy grande.