¡El gas, El gas!

Columnas lunes 26 de diciembre de 2022 -

@onelortiz

Producto de los altibajos de la recuperación económica después de la pandemia de Covid-19 y de la invasión de Rusia a Ucrania, que causó el aumento de los precios de granos y combustibles, el 2022 estuvo marcado por la inflación mundial. Europa, Asia y por supuesto, América registraron inusitadas olas inflacionarias.

México terminó el año con una inflación del 7.7%, con lo cual se rompió la racha de seis quincenas a la baja consecutiva. Padecimos la mayor inflación en 40 años. La burbuja inflacionaria no llegó a los dos dígitos por los dos planes antinflacionarios que el gobierno puso en práctica a mediados y a finales de año. Entre las decisiones adoptadas destacaron los subsidios a los precios de los combustibles. El mayor aumento ocurrió en los precios de los alimentos.

Uno de los productos que más aumentó, dañando la economía de miles de familias mexicanas, fue el gas LP. En el primer trimestre del año, los abusos de las empresas distribuidoras fueron evidentes. El cilindro de 20 kilogramos llegó a costar seiscientos pesos. Ante estos abusos, el gobierno anunció la creación de Gas Bienestar. Los precios bajaron un poco, pero pronto las empresas gaseras comenzaron a hacer trampa. Me explico.

Desde hace 20 años vivo en la colonia Ex Hipódromo, en la alcaldía Cuauhtémoc. Por lo regular un tanque de 20 kilogramos dura un mes, quizá tres semanas en Invierno. Pero desde hace al menos un trimestre, el cilindro dura dos semanas o incluso sólo diez días. Antes de reclamar revisé mis instalaciones, no tenía fugas o consumos adicionales. Todo bien.

Pregunté a mis vecinos. Efectivamente, el cilindro también les duraba menos. En mi colonia sólo una empresa distribuye: Flama Gas, pasa las mañanas de los martes, jueves y sábados. Este jueves, varios vecinos coincidimos en la azotea cuando comprábamos gas. Pesamos los tanques, tuvieron el peso justo. Preguntamos a los repartidores por qué el gas duraba menos, si pesaba igual. Nos contestaron que desde hace meses en la empresa agregaban algún compuesto a los tanques; que los reclamos de varias colonias eran constantes.

Flama Gas abusa de sus trabajadores. Ya en confianza, los gaseros nos contaron que durante la pandemia la empresa les redujo el sueldo a la mitad; es decir, de tres mil pesos a la quincena pasaron a ganar mil quinientos pesos más propinas. Las actividades ya están al 100%, pero la empresa les sigue pagando la mitad de su salarios.

¿Qué sustancia las gaseras agregan a los cilindros? ¿Están defraudando a los consumidores? ¿Quién controla a las gaseras? La Procuraduría Federal del Consumidor y la Secretaría del Trabajo deben intervenir, es su obligación. Eso pienso yo, ¿usted que opina? La política es de bronce.

PD. Feliz Navidad.