Good Time: Viviendo al límite

Por Antonio Rodríguez

De noche todo se magnifica. Por muy lógico que suene, y por ende redundante, el ruido de noche es más ruido, el silencio nunca es silencio, siempre hay un pequeño tintineo que lo pervierte, ya sea desde el natural y sencillo – para algunos relajante - ulular de viento sobre las hojas de los árboles, hasta el violento y estridente sonido de patrullas y ambulancias. De noche todo se magnifica incluso la sangre, el desespero o la prisa.

Connie (Robert Pattison, tremendo) junto con su hermano discapacitado Nick (Benny) roban un banco de manera aparentemente sencilla, las palabras “robo de banco” y “sencillo” nunca deberían ir de la mano; cuando están prácticamente en la huida todo comienza complicarse por “casualidad” y así, por “casualidad” todo lo demás comienza a suceder.

La expresión latina Deus ex machina quiere decir «Dios a través de la máquina». Tiene una función literal y figurativa, se remonta al teatro en Grecia y permitía que un personaje apareciese en el escenario como si descendiese desde las alturas y si el escritor de la obra no encontraba manera de dar un desenlace cuerdo, lógico y gustoso, era Zeus quien descendía de los cielos para arreglar todo mágicamente, dios así lo quiso o todo por obra de dios.

La huida se complica y se convierte en un caso más de “huida hacia adelante” en donde lo más sencillo es complicarlo todo y que con base en la verborrea y el ingenio de Connie algo tendría que salir bien, ya por mera suerte o coincidencia, pero abusar de la suerte resulta ser más adictivo que cualquier droga.

Es bien difícil utilizar el Deus ex machina, incluso para muchos escritores es la prueba fehaciente de ser un mal escritor, de ser flojo a la hora de dar verosimilitud a la trama. Los hermanos Safdie tienen claro esto, y haciendo todo lo contrario a lo recomendado, a lo visto en grandes obras cinematográficas, deciden utilizar todo el tiempo este recurso de manera tan inteligente, y soberbia, que el Deus ex machina se desvanece a una mera casualidad, ligada incluso al nombre mismo del filme: Good Time- Buen tiempo.

Good Time no hace que uno pase un buen momento (en el mejor sentido) los directores y el reparto hacen que el espectador sienta vívidamente lo que está aconteciendo, la ansiedad y el pánico de la noche entre los pasillos de la cárcel, el hospital, las ciudades semidesérticas o incluso un departamento solitario, nunca se desvanecen, si acaso tal vez en los últimos fotogramas del filme en donde se nos muestra lo que sucede con el hermano con minusvalía de Connie. Cuan gratificante es cuando un filme nos agarra desde el primer momento y no nos suelta nunca.