LAS RECOMENDACIONES SUTILES DE HACIENDA A BANCOS COMERCIALES

EL ESTUDIO que dio a conocer la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre la banca comercial nos confirma que los banqueros han nadado de “muertito” en esta administración, y viven de los dividendos que les dejan los papeles de gobierno que abultan la deuda interna y de los márgenes de ganancias que les dejan las operaciones con pesos y dólares, vía remesas.

El denominado “Panorama estratégico de la banca mexicana 2021”, que es una evaluación del desempeño de los 50 bancos comerciales vigentes hasta 2021, y que fue elaborado por la Unidad de Banca, Valores y Ahorro de la SHCP hace llamados de atención, aunque muy sutiles, a los banqueros mexicanos porque no hay fortalecido sus pilares de sostenibilidad, ni tampoco se preocupan porque haya más servicios de banca digital en lugares apartados del país, y mucho menos se han dado a la tarea de darle atención a grupos en situación de vulnerabilidad.

Es más, los bancos tampoco se preocupan por quienes tenemos cuentas de ahorro vigentes, chequeras o tarjetas de crédito o débito con esos bancos comerciales, porque al cabo de la pandemia sanitaria el 12% de ellos se tornaron más estrictos en sus políticas para otorgar el crédito y el 72% ni siquiera se movió. Por ello hubo mortandad de empresas, aumento en el desempleo y morosidad en los adeudos con esas instituciones.

Queda claro que únicamente 16% del sector bancario comercial en México flexibilizó sus medidas para el otorgamiento de crédito y el 72% de las instituciones financieras cerraron sucursales por la baja rentabilidad en las mismas, pero tampoco mejoraron sus sistemas y plataformas de atención digital.

Sobre cambio tecnológico, sólo 48% de las instituciones financieras en el país cuentan con una estrategia Fintech y en materia de riesgos cibernéticos sólo tienen a una persona o equipo específico para dar respuesta a esas incidencias.

En suma, los bancos comerciales operan de manera similar en el gobierno de la 4T que en las administraciones conservadoras. Cada uno lleva agua a su molino sin tener que presumir ningún principio de solidaridad.

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EL TRISTE y vergonzoso papel de Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, y también líder de la comisión de verdad sobre el caso Ayotzinapa, como le llama el NYT, subraya que no es lo mismo hablar que actuar. La desaparición de los 43 estudiantes es un expediente que abrió la 4T para fincar su “verdad histórica”, pero sólo demostró que hubo desesperación del gobierno por “fabricar” culpables y por quedar bien con los padres de los muchachos secuestrados y asesinados. El ridículo en el que se ha sumergido el ex jefe de gobierno de la Ciudad de México es de orden mundial, al declarar al diario neoyoquino que “mucho de lo que se presentó como evidencia nueva y crucial no pudo verificarse como real” y que “hay un porcentaje importante, muy importante, que está todo invalidado”. Ni cómo ayudarles.

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Periodista (*)

Director de RedFinancieraMX

gfloresl13@yahoo.com.mx