Paro Nacional. Dignificación de la Mujer ¡Ya! 

Hoy, millones de mujeres con una sed inmensa de alzar la voz nos estamos sumando al Paro Nacional #UnDíaSinMujeres, iniciativa que ha encontrado apoyo de empresas, organizaciones de la sociedad civil, instituciones de Gobierno y, por supuesto, la ciudadanía en general.

Las redes sociales y las nuevas tecnologías de la información contribuyeron a que en muy pocos días la iniciativa tuviera un boom y se volviera una realidad, la suma de muchas mujeres obligó a que diversos sectores se posicionaran abierta y formalmente en apoyo a la causa, la erradicación de la violencia en contra de la mujer.

Como mujer, no puedo cegarme ante la ola de violencia que ha alcanzado a muchas mujeres y sus familias, la cual me obliga a replantearme lo que hago todos los días. Hoy, es momento de fortalecer la sororidad entre nosotras, no solo sumándonos a este movimiento, sino elevando la voz y luchando, mano con mano y hombro con hombro, por un México donde se nos respete plenamente.

Asimismo, considero prioritario que en nuestro país se reconozca cabalmente el valor y capacidad de todas las mujeres, que cese la violencia y la 
desigualdad que impiden el pleno desarrollo de millones de niñas y adolescentes, que muchas veces desde sus familias, son violentada y ven truncados sus sueños para alcanzar una vida mejor.

Este día, la voz de las mujeres retumba en todos los hogares de nuestro país, exigiendo respeto e igualdad de oportunidades para generar un cambio verdadero que redefina los aspectos culturales y educativos necesarios para impulsar a la sociedad hacia el reconocimiento y respeto de los Derechos Humanos.

El paro nacional revalorizará el papel de las mujeres en la vida social, política, cultural y económica de nuestras comunidades; de igual forma, será una ocasión histórica para desarrollar una sociedad más sensible y consciente de las dificultades que vivimos las mujeres todos los días.

El paro es un ejercicio pleno de libertad de expresión y debe ser un ejemplo para que, nunca más, la voz de las mujeres sea censurada.

Este es solo un paso más en la larga y compleja labor de alcanzar la igualdad, el trabajo que realicemos hoy será la herencia que dejaremos a nuestras hijas e hijos.

Ni un paso atrás en la dignificación de la mujer.