Pilar Roldán, Honor a Quien Honor Merece

Hablar de la única edición olímpica de la historia en nuestro país, es recorrer prácticamente tres o hasta cuatro generaciones, ya que en mi caso, mis padres eran muy jóvenes cuando los oros de Ricardo Delgado y Ántonio Roldán en boxeo, además del de Felipe "Tibio" Muñoz en natación.

Pero quienes si se acordaban muy bien, eran mis abuelos, que pese a ser españoles vivieron esas olimpiadas como suyas, y recuerdo que también me contaron sobre las preseas plateadas de José "Sargento" Pedraza en la marcha de 20 kilómetros, así como la de Álvaro Gaxiola en clavados desde la plataforma de los diez metros, pero desafortunadamente ambos ya fallecieron.

En cuanto a la tercera presea plateada de los Juegos Olímpicos de México 1968, me platicaban que fue vitoreada y aplaudida en la Sala de Armas "Fernando Montes de Oca", cuando la capitalina Pilar Roldán, subió al podio de segundo lugar, en el deporte del Esgrima en la modalidad de Florete.

Hoy a sus 83 años de edad, la señora Roldán radica en Playa del Carmen, con parte de su familia, donde vive tranquila y con la satisfacción enorme de que la gente que la vio competir, así como la gran mayoría que hemos aprendido de ella por la historia misma y hasta las nuevas generaciones, somos capaces de seguir engrandecimiendo ese acontecimiento a pesar del paso de los años.

Es por ello, que con el consentimiento inmediato de la presidenta municipal de Solidaridad; Lilí Campos Miranda, nos dimos a la tarea en mi papel de director del Instituto Municipal del Deporte de invitar a Doña Pilar al abanderamiento de la delegación playense que se encuentra participando en las distintas etapas de los Juegos Deportivos Estatales.

En ese marco se le rindió un sencillo, pero merecido homenaje a Pilar Roldán, quien al recibir el reconocimiento físico de parte de la alcaldesa y escuchar la ovación de atletas, padres de familia e invitados especiales, no pudo más y salió un emotivo llanto de un -Pilar- del -Deporte Mexicano-.

La medallista de plata en México 68, se mostró muy agradecida y emocionada por dicho acto, diciéndome en corto que este acto la remontó al abanderamiento de la delegación mexicana que defendió con mucha honra la bandera nacional en la que fue nuestra fiesta.

Es así como todas nuestras -Glorias Deportivas- deberían ser reconocidas en vida, delante de las nuevas generaciones que tan buenos ejemplos como el de Pilar Roldán necesitan.

Antes de despedirme y para no dejar inconcluso el dato las tres medallas de bronce para México en el 68, fueron para Agustín Zaragoza y Joaquín Rocha en boxeo, además de la de María Teresa Ramírez en natación.