Una morena para Morena

Por Onel Ortíz Fragoso

@onelortiz

En la CDMX, el resultado de las elecciones de 2024 son un volado. Las encuestas otorgan a Morena una ventaja considerable, pero su triunfo no está escrito en piedra. En 2021, el partido de AMLO ganó las encuestas, pero la oposición ganó la mitad de la Ciudad, lo que le costó a Gabriel García el puesto y la confianza. Para los morenistas la campaña capitalina no será un día de campo. Para conservar la CDMX necesitan un candidato o candidata que además de tener la confianza del Presidente, el apoyo del pueblo bueno y el respaldo del partido, sea competitivo.

El Tercer Congreso Nacional de Morena movió el tablero capitalino, porque Mario Delgado y Citlalli Hernández seguirán en sus cargos de Presidente y Secretaria General, hasta después de las elecciones del 2024. Los dos son actores políticos importantes en la capital. Mario era un fuerte aspirante a la candidatura a la Jefatura de Gobierno y Citlalli un referente para los “puros”.

En las nueve entidades federales que renovarán su gobierno en 2024, Morena y AMLO tendrán dos corcholatas, un hombre y una mujer, para ajustar género. En la CDMX, los perfilados son: Martí Batres, Rosa Icela Rodríguez y Luisa María Alcalde.

Si todo marcha como hasta ahora y a la CDMX, le corresponde postular a un varón, Martí Batres ganará la encuesta. Nadie puede regatearle sus méritos y trayectoria dentro del lopezobradorismo, pero sí hay dudas de su arrastre y carisma para ganar otros sectores del electorado más allá del universo morenista.

Si corresponde mujer. Rosa Icela Rodríguez, Secretaria de Seguridad Pública, tiene la confianza del Presidente, fue una eficaz funcionaria capitalina en varias administraciones y ahora federal, pero simplemente los morenistas no la ven como candidata, encabezando mítines o ganando debates.

Dentro y fuera del partido, pero sobre todo en Palacio Nacional, las miradas y las intenciones se dirigen a Luisa María Alcalde, Secretaria del Trabajo, para que sea la abanderada morenista en la CDMX. Tiene la confianza del Presidente, quien la proyectó a puestos de importancia política desde muy joven. Es Morena de corazón, diría que es la imagen misma de Morena. Lo más importante, representa un auténtico relevo generacional. Es la única carta de la baraja morenista que puede acercar a los jóvenes capitalinos y recuperar las clases medias que en 2021 se alejaron de Morena y de AMLO.

Luisa no ha dicho que quiere, pero el amor, el dinero y las precampañas no se pueden ocultar. Clara Brugada, alcaldesa de Iztapalapa, le dio su apoyo. Su presencia en prensa y redes sociales aumentó. Lo mismo las reuniones en su apoyo. Pronto sabremos si en la CDMX, Morena competirá con una morena.

La política es de bronce.