¿Dónde estás Dione Anguiano?

Columnas viernes 29 de enero de 2021 -

La desolación que ha dejado la pandemia no solo ha mermado el ánimo de las personas, los animales, sobre todo los de compañía, están padeciendo la peor crisis en los últimos años, debido a que el abandono se incrementó por la muerte de quienes eran sus familiares o porque la economía no les permite alimentar a perros y gatos. Las autoridades emanadas de Morena no invierten un peso en esterilizar y así evitar que la sobrepoblación sea mayor y con ella el sufrimiento de estos seres vivos, lo que me genera una enorme nostalgia y gritar: ¿dónde estás Dione Anguiano, te necesitamos?

Ustedes apreciables lectores de ContraRéplica se preguntarán por qué menciono a la exdelegada en Iztapalapa en esta crisis que afecta a los animales de compañía, la respuesta es simple: Dione Anguiano fue la política que más aportó al bienestar y a la protección de los animales, no solo de la demarcación que gobernó, también de todos los que cohabitan con nosotros en esta urbe.

A esta especial mujer se le debe que los animales de todas las especies estén en el artículo 13 M, inciso B, de la Constitución de la Ciudad de México, donde se les reconoce como seres sintientes. Fue ella, quien me empujó para ser diputada constituyente y luchar por la dignidad de los animales a quienes los políticos de todos los partidos minimizan.

Anguiano fue la única en la administración pasada que visibilizó a los animales en Iztapalapa e invirtió en ellos un presupuesto para esterilizar a 23 mil perros y gatos, así como algunos otros animales de otras especies que dejaron de tener hijos. No sólo ayudó a estos seres vivos, apoyó a las 23 mil familias y rescatistas que acudieron a las jornadas masivas y gratuitas de esterilización.

Siento una enorme nostalgia acompañada de una gran tristeza, porque en estos momentos de crisis sanitaria, miles de animales están desamparados viviendo prácticamente en las calles de esta Ciudad de México debido, primeramente, a que protectoras y protectores han muerto por coronavirus y ellos, los perros y gatos que tuvieron un hogar, nuevamente sufren de soledad y hambre.

La economía que nos ha golpeado a todos los mexicanos es la segunda causa del incremento en el abandono de animales de compañía, quienes han perdido su empleo optan simplemente por echar a la calle a sus animalitos, sin importarles ni agradecerles el amor puro y leal que por meses o años les dieron.

Todo esto me lleva a cuestionarme si Dione Anguiano estuviera pasiva ante esta situación y la respuesta llega como un rayo de sol a consolarme. No, ella no estaría pensando únicamente en cómo sacar adelante a las personas enfermas por esta pandemia, ni a buscar la estrategia correcta para que las sanas no se contagien, estaría ayudando, aportando recursos para aminorar el abandono y la crueldad en la que viven los animales de compañía durante esta pandemia.