El Fiasco de la oposición

¿Por qué la oposición actual en México ha resultado un fiasco? Es gracioso ver volar las casas de campaña vacías cuando el viento remolinea y hace lo suyo en la explanada del zócalo tomada por la oposición chiste de este país. Esa banda de gente que antes tenía cooptado el poder y quiere ser oposición justo como era al mando, plagados de comodidades gobernando solamente para no perderlas.

No cabe duda de que la oposición se manifiesta o hace “movimientos sociales” justo como solía gobernar. En los sexenios pasados del PRI y del PAN, da lo mismo de quién hablemos, la forma de dirigir sus mandatos fue muy obvia, siempre enfocados en mantener los privilegios, cuidando que las conexiones que solían terminar en tráfico de influencias se fortalecieran, que los grandes negocios quedaran siempre en manos de los mismos personajes; aquellos que se atrevían a construir enormes casas a los presidentes para que estos les ayudaran adjudicándoles millonarios contratos. Y la lista podría seguir.

Pero lo que sucede ahora que aquellos se han quedado sin su gallina de los huevos de oro, es que mueren por tenerla de nuevo. El problema de la ridícula oposición, aquellos que se decían tecnócratas, neoliberales, los portadores de las ideas económicas innovadoras que sacarían al país del pozo en el que siempre estuvo, es que ahora que parecen un chiste, lo único que quieren es traer de vuelta su época de oro y no están armando estratégicamente su ruta crítica para ser oposición.

Las casas de campaña volando por el cielo del centro histórico, son una metáfora ridículamente acertada. Pudiendo iniciar FRENAA como un movimiento real, fuerte y disruptivo, decidieron que sus deseos interiores de traer de nuevo las comodidades solo para ellos salieran a flote y se dejaran ver volar, al igual que las casitas de campaña completamente vacías.

¿Qué les costaba meterse a las casas y manifestarse de forma REAL? ¿Qué no les urge un verdadero cambio? ¿Qué no están verdaderamente hasta el gorro del presidente? ¿por qué simular y no hacerlo de verdad?

Les digo, la vieja escuela los traiciona. Así solían gobernar. Con programas, políticas públicas, ideas, gestiones, propuestas que tuvieran cualidades muy específicas; que pareciera que ayudarían a mucha gente, que parecieran inclusivas, pero que no solucionaran nada en la vida, para poder ser tomando del dinero del erario y -de nuevo- conservando sus comodidades y privilegios.

Teniendo todos los recursos para asesorarse, buscar apoyo de intelectuales que podrían darles grandes ideas para crear una estrategia sólida contra la administración actual, decidieron el camino más fácil; lo mediático, lo que vende, lo que se hace viral, pero que al final no cambia absolutamente nada.

Pero no, decidieron dejar las casitas de campaña vacías e ir a sus casas llenas de comodidades para simular, una vez más, que México les importa.