El GCDMX reinicia el programa de desarme

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El Gobierno de la Ciudad de México inició ayer con la etapa dos del programa Sí al desarme, sí a la paz con el objetivo de retirar más de 4 mil 500 armas.

“Al retirar (las armas) de las calles, casas y familias, lo que estamos haciendo es desarmar para promover la paz en la Ciudad de México.

“Porque el objetivo es quitar las armas para que no haya delitos, homicidios ni daños a la sociedad”, mencionó Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno, afuera de la Basílica de Guadalupe.

“Disminuir los índices delictivos en la ciudad tiene muchas aristas, una de ellas es el trabajo que hace nuestro secretario de Seguridad Ciudadana (Omar García Harfuch) con el trabajo cotidiano de tener más y mejor policía con mayor inteligencia, más preparada, más capacitada”, manifestó.

Sobre el metal recolectado con las armas destruidas, la mandataria capitalina indicó que servirán para elaborar la obra Molino para la paz, del artista Miguel Ángel Campos, que en mayo será instalada en una de las avenidas de la Ciudad de México, la cual está aún por definir.

Sheinbaum agradeció a la Iglesia Católica por permitir el uso de los atrios para la implementación del programa, donde explicó que en las zonas alrededor de los recintos católicos la población reconoce que es un lugar neutral y sin persecución.

Desde la secretaría de Gobierno se informó que para este año se reforzarán las visitas casa por casa, en parques, escuelas y lugares de mayor afluencia, para hacer conciencia sobre los riesgos de tener armas en casa.

“En 2019 se recuperaron 4 mil 768 armas de fuego, así como 934 mil cartuchos y municiones, arsenal que fue destruido por el Ejército y que representa 90 por ciento del total de las armas recabadas y destruidas en el país, por programas preventivos”, difundió la dependencia.

El módulo de canje estará ubicado en el atrio de la Basílica de Guadalupe, en la alcaldía Gustavo A. Madero, desde este jueves y hasta el 4 de febrero, de 10:00 a 14:00 horas.

El proceso será totalmente anónimo, por lo que no habrá investigaciones ni cuestionamientos sobre el origen de las armas.