El legado de Andrés Manuel puede estar en riesgo

Cada vez se rebasa el aforo permitido. Justifican el evento, y se hacen de la vista gorda. En fin, con el propósito de evitar el fracaso, actúan como si nada pasara. De hecho, todavía se han llevado a cabo reuniones, eventos masivos y destapes en que la población se aglutina para dejar a merced lo más sagrado de la vida: la salud. Pese a que muchos de ellos— evidentemente no tendrán problema para ganar— con el vehículo de participación de Morena, deben hacerse cargo de salvaguardar la integridad; es cierto, es una competencia electoral, pero también hay un esfuerzo de las autoridades federales por salir lo más pronto posible de esta situación.

Vale la pena mencionar esto, porque evidentemente Morena es el gran favorito. Se prevé que gane de 9 a 10 gubernaturas, gracias al inmejorable momento que pasa el presidente Obrador, pero, también, a la animadversión depositada al bloque de oposición que no da una. No se ha podido reponer de la sacudida del 2018, y todo indica que, en 2021, es posible que algo similar ocurra.

Entonces, con un Morena dominante, el esquema Lopezobradorista crecerá. Aunque, ¿cuántos aliados tendrá el presidente? En teoría todos. Andrés Manuel López Obrador depositó su confianza en ellos, pero, una vez que triunfen en sus entidades, cada uno de ellos se hará cargo de la política de su territorio. Impondrá su propio estilo y elaborarán acciones de acuerdo a los proyectos planteados o, al interés adquirido en campaña, así mismo, se contaminaría el gabinete— sí se sigue la tradicional designación— del influyentismo. No todos son honestos como el mandatario federal, si bien, implica que AMLO tome el riesgo.

No todos los que trabajan en las campañas están, y los que no hacen nada se apuntan en primera fila. Así que, el amiguismo, será el flujo de los privilegios de “nadar de muertito”.

AMLO aprobó las senadurías de Lilly Téllez y German Martínez. Gracias a Andrés Manuel están ocupando un espacio; aunque, no han sido aliados de la 4T, es cierto que hay derecho a disentir, pero, actúan como opositores del poder. De hecho, la periodista llegó con comentarios positivos del presidente y salió despreciando su gestión. Es común que en la política pase esto; el comportamiento y la personalidad son volátiles cuando se trata del poder. Hay contradicciones, simulaciones, y una vez instalados en los cargos públicos, no mejoran en nada.

A tres meses de la cita, este fenómeno se puede expandir. La amenaza está latente. Panistas y priistas de cepa aterrizaron en la competencia con Morena. Algunos en su momento fueron muy críticos, incluso, atizaron con el spot propagandístico que, el ahora mandatario, era un peligro para México. Sin embargo, reciclados por la coyuntura, participarán.

Entonces, ¿qué herencia logra dejar AMLO? Muchos de los candidatos pueden ser un fiasco; ¿y, que pasará? Al considerar su pasado y los señalamientos, el esquema de ampliar el territorio guinda, llegaría a ser un legado dudoso e incierto. Los asuntos del presidente y su motor de inspiración en la agenda de la 4T, pueden quedar rebasados. Durante esa etapa se colarán oportunistas con una “cola” muy larga de corrupción y hechos deshonestos.

Esos ejemplos mancharon la imagen del presidente que, a pesar de estar intacta, puede ocasionar saldos negativos en 2024. Es cierto que bastará con su respaldo para que Morena tenga una probabilidad inmensa de ganar la próxima competencia presidencial, pero, esos esfuerzos, pueden chocar a futuro después de que AMLO se retire ¿Qué sucederá? El funcionamiento del partido está en riesgo de descender y eso lo saben.

Por esa razón, las formas importan y valen mucho. La imagen del presidente puede salpicarse porque en medio de la elección del 2021, francamente va un esquema variopinto de panistas y ex priistas, muchos de ellos con muy mala reputación.