México inicia una nueva etapa de transformación bajo el liderazgo femenino de Claudia Sheinbaum

En un emotivo discurso, la presidenta Claudia Sheinbaum celebró el inicio de la segunda etapa de la Cuarta Transformación, un momento histórico que marca el liderazgo femenino en la conducción del país. Ante una multitud, Sheinbaum recordó cómo, el pasado 2 de junio, el pueblo mexicano se pronunció a favor de una transformación democrática y pacífica.

“Hoy, después de 503 años, por primera vez, las mujeres conducimos los destinos de nuestra hermosa nación. Y digo llegamos, porque no llego sola, llegamos todas”, afirmó. Su discurso resonó con la historia rica de México, recordando a líderes que, a lo largo de los siglos, lucharon por la libertad, la justicia y los derechos humanos, desde Hidalgo hasta Juárez, y desde las sufragistas hasta las heroínas contemporáneas.

La presidenta subrayó la riqueza cultural y la diversidad del país, destacando su herencia indígena y la contribución de las mujeres en la construcción de una sociedad más justa. “México es un país maravilloso, por su pueblo generoso, solidario, alegre, libertario, resistente, rebelde, sabio y, hoy, empoderado”, declaró.

Sheinbaum también se dirigió a los logros alcanzados durante su administración, resaltando que, según el Banco Mundial, 9.5 millones de mexicanos han salido de la pobreza en solo seis años. “Cambió el modelo de desarrollo del país, del fracasado modelo neoliberal y el régimen de corrupción y privilegios a uno que surgió de la fecunda historia de México, del amor al pueblo y de la honestidad”, expresó.

En su visión para el futuro, la presidenta presentó los principios del "humanismo mexicano", abogando por la prosperidad compartida y la equidad. Enfatizó la importancia de que las mujeres tengan derecho a la igualdad sustantiva y que todos los ciudadanos disfruten de las libertades fundamentales.

La presidenta también hizo un llamado a la reflexión sobre el pasado reciente: “Evaluemos con la cabeza fría qué pasó durante estos seis años”. Aseguró que bajo su gobierno, se mantendrán todos los programas de bienestar, y se crearán nuevos apoyos para las mujeres y la infancia.

“Llegan nuestras hijas hermosas y valientes, y llegan nuestras nietas, llegan ellas, las que soñaron con la posibilidad de que algún día, no importaría si naciéramos siendo mujeres u hombres, podemos realizar sueños y deseos”, concluyó Sheinbaum, enfatizando que su administración es un compromiso hacia un México más justo y equitativo.

“Soy madre, abuela, científica y mujer de fe. Y, a partir de hoy, por voluntad del pueblo de México, la presidenta constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. Gobernaré para todos y para todas, y tengan la certeza de que pondré mi conocimiento, mi fuerza, mi historia y mi vida misma al servicio del pueblo y de la patria. Tengo la certeza de que consolidaremos juntas y juntos un México cada día más próspero, libre, democrático, soberano y justo, no les voy a defraudar”, finalizó.