Protestas en Barcelona por Pablo Hasél sala con ocho detenidos

Los disturbios en las protestas por el encarcelamiento del rapero español Pablo Hasél han vuelto por tercer día consecutivo en Barcelona y en otras ciudades como en Tarragona, Barakaldo y Valencia.

Hasél fue arrestado el pasado 16 de febrero por referirse al rey emérito Juan Carlos I como un "capo mafioso" y un "borracho tirano" y acusar a la policía de torturar y matar a manifestantes y migrantes. Es acusado de "glorificar el terrorismo" e insultar a la monarquía.

En la ciudad Condal 300 manifestantes lanzaron ayer piedras y petardos contra la línea de Mossos d'Esquadra que protege la Consejería de Interior de la Generalitat.

Los convocados se desplazaron desde la plaza Tetuán hacia la sede del departamento que dirige Miquel Sàmper, en los aledaños, y allí han lanzado objetos y arrancado adoquines, hasta que los Mossos alertaron por megafonía que iban a actuar de manera inminente.

Posteriormente llegaron a la sede de El Periódico, donde aventaron piedras contra los cristales, y armaron barricadas que posteriormente incendiaron.

Los disturbios se extendieron durante la noche a varias calles del Eixample, donde grupos de manifestantes quemaron contenedores y una moto, y levantaron barricadas.

Al menos dos agentes de la policía catalana resultaron heridos por lanzamiento de piedras, uno de ellos por un impacto en la cabeza dentro de un vehículo policial. Además, el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) también atendieron a dos personas, una herida de carácter leve y otra menos grave, y ambas fueron trasladadas a centros sanitarios.

Por el momento, han sido detenidas ocho personas durante los disturbios en Barcelona, según cifras de la policía catalana. Las detenciones son por desórdenes públicos, actos vandálicos y participación en lanzamientos de objetos contra la policía.