TIRADITOS

Bien dice ese dicho "candil de la calle, oscuridad de su casa", mismo que hoy mejor que nunca aplica para el líder nacional del PRI, Alejandro ‘Alito’ Moreno, pues por si algo le faltara al turbio proceso de selección de candidatos tricolores en lo que queda del PRI Estado de México, su líder nacional, Alejandro Moreno, le hizo flaco favor a Ana Lilia Herrera, la dirigente estatal, al embarrarla en la acusación en contra del hoy senador Eruviel Ávila, por supuestos desvíos en su administración como gobernador mexiquense hace casi siete años ya, y contando. Y es que, nos cuentan, ‘Alito’ dijo que una de las áreas en cuestión era la educación, donde Ana Lilia Herrera fue precisamente la secretaria de Avila Villegas. Tremando favor le hace a su compañera. A ver qué pasa.

Otro palo a empresas por etiquetado

Si no sucede nada extraordinario, el próximo lunes la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) negará otro amparo interpuesto por empresas que se oponen al etiquetado frontal en alimentos y bebidas. Hay que recordar que, a través del etiquetado frontal de advertencia, los consumidores pueden identificar de manera fácil y rápida aquellos productos alimenticios preenvasados con contenidos excesivos en energía, azúcares añadidos, grasas saturadas, sodio y aquellos que contengan edulcorantes, cafeína, u otros asociados a factores de riesgo. La ministra Yasmín Esquivel Mossa propone reconocer su constitucionalidad en el amparo en revisión 465/2022.

Tiempos de guerra, tiempos de bonanza para Israel

Capitán Swing, la editorial española, ha publicado recientemente un interesante título: ‘El laboratorio palestino’, escrito por el periodista de investigación australiano Antony Loewenstein, de sólo 50 años. Es un gran reportaje sobre la industria armamentista y el pensamiento bélico de Israel. Entre otros datos que Antony nos acerca está el que la industria de defensa se ha convertido en el principal negocio de exportación de Israel… Y nos relata que el argumento clave de venta del Estado judío es que toda la mercancía de sangre —es decir, el armamento y tecnología— han sido probados “exitosamente” en la Palestina ocupada por las tropas israelíes.