El telescopio Hubble de la NASA captó el momento exacto en el que el cometa C/2019 Y4, mejor conocido como ATLAS, se desintegró en el espacio.
Algunos fragmentos del cometa tenían un tamaño similar al de una casa. Este objeto espacial fue descubierto por el sistema de prospección astronómica robótica ATLAS (Asteroid Terrestrial-impact Last Alert System) en diciembre de 2019.
El cometa comenzó a iluminarse durante el mes de marzo, por lo cual, algunos astrónomos anticiparon que podría apreciarse a simple vista en mayo. No obstante, el objeto se obscureció y llevó a que los científicos contemplaran que el núcleo helado podría fragmentarse.
La fragmentación del ATLAS fue confirmada por el astrónomo José de Queiroz, quien logró fotografiar alrededor de tres piezas del cometa el pasado 11 de abril.
Las imágenes del Telescopio Espacial Hubble mostraron que los fragmentos rotos estaban envueltos en una cola de polvo cometario barrida por la luz del sol.
Lo anterior podría significar que la fragmentación de cometas es probablemente común e incluso podría ser el mecanismo dominante por el cual mueren los núcleos sólidos y helados.
"Esto es realmente emocionante, tanto porque tales eventos son súper geniales de ver como porque no ocurren muy a menudo. La mayoría de los cometas que tienen fragmentos son demasiado débiles para verlos. Los eventos a tal escala solo ocurren una o dos veces por década", comentó Quanzhi Ye, responsable del segundo equipo de observación del Hubble.
De acuerdo con los especialistas, el núcleo completo (antes de la ruptura) pudo haber tenido la longitud de dos campos de fútbol.
Por el momento, el cometa Atlas se encuentra dentro de la órbita de Marte, a una distancia aproximada de 145 millones de kilómetros de la Tierra, con base en las últimas observaciones del Hubble.