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“Mi primo me violó, le conté a mi mamá y a mi pa, la úorma en que siento que me a, no era un juego, me estaba y mi cuerpo me da asco"s pá y me prohibieron hablar de esto, porque es de la familia y si hacemos algo, todos van a estar en nuestra contra”. Adolescente de 13 años
“Mi tío me violó, le conté a mi mamá y ella me dijo que iba a denunciarlo, pero ya pasó mucho tiempo y todo sigue igual. Pero yo me veo en el espejo y mi cuerpo me da asco”. Adolescente 14 años
“Yo siempre creí que la violación sólo se daba de un hombre a una mujer, no sabía que también sucedía de mujer a mujer, cuando yo lo supe comprendí que lo que me hacía mi prima desde que era una niña, no era un juego.
Cada vez son más los casos que escuchamos o que sabemos de algún niño, niña o adolescente que sufrieron algún tipo de violencia sexual (acoso, tocamientos y actos sexuales no consentidos). Casos, que se llenan de más violencia cuando los familiares al tener conocimiento de esto, no quieren actuar para que sean atendidas de manera adecuada las víctimas y para que el abusador sea llevado y juzgado ante las autoridades. La razón, es que el 90% de los abusadores, según la Comisión Nacional para erradicar la Violencia, son de la misma familia.
La Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM), en enero de este año, en su Balance Anual sobre la situación de la niñez en el país, dio a conocer que durante 2022, 9 mil 929 personas de 1 a 17 años de edad fueron atendidas en hospitales de México por violencia sexual, cifra que ha colocado a México como el primer país del mundo en abuso sexual de niños, niñas y adolescentes (OCDE).
En este contexto la terapeuta y sexóloga Karla Barrios Rodríguez presentó su libro “Ante la violencia sexual infantil. Caminos para la recuperación desde un enfoque psicosocial, humanista y feminista” (Editorial Pax, 2024), texto en el que, además de brindar herramientas para prevenir, abordar y superar la violencia sexual infantil, busca que se escuche la voz de las niñas, niños y adolescentes que han vivido violencia sexual en espacios donde “se supone” deben tener “seguridad” como la familia o la escuela, es muy complicado para ellos hablar de lo que vivieron, lo que hace muy probable que cuando sea adulto, esto resurja marcando negativamente su vida y sus relaciones con los demás.
Por ello, Karla Barrios, a partir del acompañamiento que ha dado a sus pacientes, les ha ayudado a encontrar y alzar su voz, para expresar su dolor, para nombrar en muchas ocasiones, a sus victimarios, y así entender (en parte) lo que les ha sucedido. Voz, que en este libro hacen escuchar para que todas aquellas personas que hayan pasado por una situación de violencia sexual, sepan que no están solas, que siempre habrá alguien que los acompañe, que los escuche.
“Ante la violencia sexual infantil. Caminos para la recuperación desde un enfoque psicosocial, humanista y feminista” es un libro que duele y genera una reflexión profunda, porque presenta aspectos y matices de la violencia que quizás antes no se habían considerado, pero que desde la experiencia y voz de las víctimas, se convierte en esa mano que guía para que quienes tengan a su cuidado a un niño, una niña o un adolescente, tengan claro que “Pocas heridas dejan una huella tan profunda como el abuso sexual en la infancia”, por ello, siempre “es más fácil construir niños fuertes que reparar adultos rotos”.
ROSALIA ZEFERINO SALGADO
Asesora en Comunicación Estratégica
e Imagen Pública