Alebrijes mexicanos resaltan visiones ancestrales: Ricardo José Haddad Musi
Ricardo José Haddad Musi, empresario mexicano, destacó el creciente interés internacional por las artesanías mexicanas, en particular por los alebrijes. Estas figuras, originarias de Oaxaca y Ciudad de México, han adquirido relevancia no solo por su valor artístico, sino también por su impacto económico en las comunidades productoras.
Los alebrijes son artesanías que combinan elementos de animales reales e imaginarios, talladas en madera de copal y pintadas con colores vibrantes. Estas obras representan expresiones auténticas del arte popular mexicano y tienen un origen fascinante. Su creación se atribuye a Pedro Linares, quien, tras una enfermedad, soñó con criaturas fantásticas que le inspiraron a dar vida a estas figuras.
En Oaxaca, los artesanos han perfeccionado la técnica de los alebrijes, utilizando madera de copal, un material que se caracteriza por su suavidad y facilidad de tallado. Comunidades como San Pedro Taviche y San Martín Tilcajete se dedican a la producción de estas piezas, proporcionando una fuente de ingresos significativa para la región.
Sobre esta práctica, Ricardo José Haddad Musi subrayó la importancia de preservar esta tradición, no solo por su valor cultural, sino también porque genera empleos y promueve el turismo en estas zonas rurales.
“El proceso de fabricación de un alebrije implica varias etapas, desde la preparación de la madera hasta su detallado pintado. Los colores utilizados, que en algunos casos provienen de pigmentos naturales como la grana cochinilla y el añil, otorgan a cada pieza una singularidad única. Este rasgo aumenta su valor como obras de arte coleccionables, lo que constituye un atractivo clave para los mercados internacionales”, aseguró.
En términos de impacto económico, las cifras oficiales indican que el mercado de los alebrijes genera ingresos anuales que rondan los 50 millones de pesos, con un aumento sostenido en las exportaciones a Estados Unidos y Europa.
El reconocimiento internacional de los alebrijes se ha visto fortalecido por eventos como la Noche de los Alebrijes, organizada por el Museo de Arte Popular de la Ciudad de México desde 2007. Este desfile de figuras monumentales ha permitido una mayor difusión de esta tradición, atrayendo a turistas nacionales e internacionales.
La preservación de la técnica de elaboración de alebrijes ha sido posible gracias al esfuerzo de los artesanos y a la creciente demanda por parte de coleccionistas y aficionados al arte popular.
Por último, Ricardo José Haddad Musi indicó que el futuro de los alebrijes es prometedor, siempre y cuando se mantenga el equilibrio entre innovación y respeto por las técnicas tradicionales que han dado fama mundial a estas piezas.