Destapan deportistas corrupción y falta de apoyo del Instituto del Deporte en Oaxaca

Carolina Espina

Deportistas oaxaqueños destaparon la cloaca en el Instituto de Cultura Física y Deporte de Oaxaca (Incude), donde según sus propias palabras, prevalece la corrupción y la falta de apoyos para decenas de deportistas que, durante años, han buscado sobresalir en diferentes diciplinas y que muchos han logrado, pero gracias al apoyo de su familia y sociedad en general, y no del Gobierno del Estado de Oaxaca, como lo subrayan en sus boletines.

La gota que derramó el vaso, fue un comunicado emitido por el Incude, donde hacia alarde de las medallas ganadas por jóvenes participantes en los Nacionales Conade, donde compitieron 27 diciplinas, de las cuales solo 14 obtuvieron medalla, dándole a la entidad 81 preseas nunca antes alcanzadas, sin embargo, muy lejos del puntero que obtuvo más de 850.

“Este resultado histórico es posible gracias a la inversión de 23 millones de pesos desde la etapa estatal, regional, macroregional y nacional que realizó el Gobierno del Estado de Oaxaca, a través del Incude Oaxaca, incluyendo transportación aérea a las cinco diferentes sedes, uniformes exteriores y de competencia”, se lee en su boletín, situación que causó el enojo de deportistas que alzaron la voz para desmentir dichos apoyos, señalando la falta de atención desde el inicio de la presente administración.

Y es que desde su polémico nombramiento como directora del Incude, por no tener estudios ni la suficiente experiencia, Montserrat de los Ángeles Aragón Heinze, ha sido cuestionada no solo por la falta de resultados en dicho instituto, sino además por las múltiples quejas de deportistas que en más de una ocasión han señalado y protestado por su falta de sensibilidad ante el deporte y por el mal manejo adecuado de los recursos que son destinados para ello.

“Sin doctores, con atletas fracturados, dislocados y muchísimas lesiones que se han tenido que atender solos, con la ayuda de sus padres, porque el Incude no les apoya, pero eso sí, cuando ganan la medalla entonces los buscan para la foto”, señaló Arturo de Jesús Chávez, destacado deportista oaxaqueño, quien no dudó en externar su inconformidad.

Josafath González, reconocido entrenador, sostuvo que la falta de apoyos a los jóvenes talentos, hace que no logren llegar al alto rendimiento y se queden en el camino con sus sueños truncados. Ante esto, cabe señalar que Oaxaca solo tiene una atleta en esta categoría, la karateca Xhunashi Caballero, quien en un programa televisivo externó su experiencia con el Incude, “por su incapacidad para realizar los trámites administrativos que necesitaba, no pude acudir a los torneos que me darían el pase a los Olímpicos”.

Blanca Gómez, una madre de familia, escribió: “Medallas ganadas en juegos nacionales que fueron obtenidas gracias a que los deportistas acuden a competencias nacionales que obviamente pagamos los padres haciendo infinidad de actividades. Ellos solo se toman la fotografía final y se olvidan. Mis hijos y nosotros los padres llevamos boteando varios días en las calles como lo han realizado varios deportistas para que puedan acudir al Campeonato Panamericano de Karate. Hace un año fuimos a visitar a la señora y nos dijo: no hay apoyo hasta que sea medallista de juegos nacionales”.

Por su parte la atleta Areli Solís, hizo hincapié también en la situación. “Mis mejores resultados fueron en el sexenio pasado por los apoyos recibidos, en este sexenio recibimos miserias y solo las veces que hicimos protestas nos atendieron de la misma forma con puras mentiras, en el año 2017 en Monterrey, me dijo que el Incude pagaría todo para ir al Panamericano, que no me preocupara por mi viaje, pero ese apoyo nunca llegó”.

Ante toda la polémica desatada por decenas de deportistas que hicieron un llamado al gobernador Alejandro Murat, la titular del Incude, Montserrat Heinze, solo se limitó a señalar que las quejas hacia ella obedecían a “grillas” y a la “tremenda envidia” que le tienen, esto sin tomar en cuenta los señalamientos de corrupción, por las facturas infladas en compra de uniformes, medallas, viáticos y alimentación para su personal, así como el pago en nómina de familiares y amigos.