Informó The Sun, que Philip Peven, un ginecólogo-obstetra retirado de 104 años, es señalado por ser el padre de cientos de hijos tras usar su propio esperma para inseminar a mujeres, muchas veces sin el consentimiento de las madres.
Una de las hijas de Peven, Jaime Hall comentó que después de someterse a pruebas de ADN descubrió que era genéticamente compatible con al menos otras cinco personas.
Después de descubrir la verdad, siguió rastreando sus orígenes hasta que dió con el doctor, quién habría sido el ginecólogo que trató a su madre. "Todos nacimos en el mismo hospital, todos nuestros certificados de nacimiento muestran al Dr. Peven como nuestro obstetra, no como nuestro padre", señaló la mujer.
Hall decidió confrontar en enero de este año a Peven, quien les confesó que habría desechado muestras de donantes por no estar probadas, y haber inseminado a sus pacientes con muestras de esperma frescas, ya fueran suyas o de alguno de los otros doctores de la clínica.
La hija de Peven aseguró que tomó la noticia de la mejor forma y no guardar sentimientos negativos hacia los doctores a pesar de que les hubieran mentido, "Sin la clínica de fertilidad y todo lo que hicieron, yo no estaría aquí. Así que, en consecuencia, no tengo más que gratitud hacia ellos por todo lo que pasó. No puedo estar enfadada o resentida de ninguna manera", dijo Lynn.
Información: Agencias Internaciones
Imagen: Redes