*Rusia es una nación petrolera, importante productora de granos y, por si todo eso fuera poco, la nación cuenta con armamento nuclear
Estamos en un mundo impredecible; sí, esta frase la pudimos haber mencionado hace 20 años, pero hoy sigue tan vigente como entonces, y muy probablemente hoy sea más real que antes.
El viernes el planeta tenía problemas más o menos conocidos, algunos más riesgosos que otros, desde problemas económicos hasta del medio ambiente, muchos problemas y desde luego soluciones.
Pero el sábado las cosas pudieron dar un vuelco, todavía es temprano para saber qué sucederá, sin embargo la Geoeconomía y la Geopolítica una vez más están inmiscuidas, como muchas veces.
En Rusia se incrementó el riesgo mundial este fin de semana; dicho país es una nación muy importante en el mapa geopolítico y geoestratégico, y por si fuera poco es una nación que cuenta con armamento atómico.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, denunció el sábado un “acto de traición" tras la entrada del líder del grupo de mercenarios Wagner, Yevgeni Prigozhin, en la ciudad rusa de Rostov, sede del mando sur del Ejército ruso; Putin describió el acto de rebeldía como una "puñalada por la espalda" a las tropas y al pueblo de Rusia.
Putin dijo en cadena nacional que el líder de la rebelión era el líder de las fuerzas mercenarias que combatían en el frente de batalla en Ucrania.
"Cualquier agitación interna es una amenaza mortal para nuestro estado como nación; representa un golpe para Rusia, para nuestro pueblo y para las acciones que estamos emprendiendo para proteger a nuestra patria", ha declarado.
"Nuestras acciones para defender a la patria de esta amenaza serán durísimas, y sus responsables serán llevados ante la justicia", aseguró el presidente ruso, quien no obstante confirmó que la situación en Rostov es "difícil" y que sus fuerzas están intentando ahora estabilizar las cosas, mientras esta ciudad estratégica se mantiene tomada por los rebeldes.
Los temores, la incertidumbre y los riesgos se desataron; fueron de tal magnitud que el mismo sábado por la tarde de Rusia el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, tuvo que salir a desmentir rumores de que el presidente ruso, Vladimir Putin, había abandonado la capital rusa para desplazarse de emergencia a San Petersburgo, en medio de la rebelión protagonizada en las últimas horas por el grupo de mercenarios Wagner.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha afirmado que el presidente ruso, Vladimir Putin, se ha ocultado en un búnker lejos de Moscú ante el avance de las fuerzas de Wagner hacia la capital, marcha que ahora parece detenida tras un acuerdo.
Los rumores apuntaban a que el hombre fuerte del Kremlin evidentemente tiene mucho miedo y probablemente está escondido, aunque se señalaba
que no estaba en Moscú.
Algunos líderes globales expresaban su preocupación, pero también advertían que esta situación era producto de las acciones de Vladimir Putin.
El líder de la organización de mercenarios Grupo Wagner, Yevgeni Prigozhin, anunció que detenía el avance de sus columnas militares hacia Moscú en la denominada Marcha de la Justicia, tras la mediación del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko.
Como decíamos, Rusia es un país que cuenta con armamento nuclear, es uno de los principales productores de granos en el mundo y también de
petróleo, forma de hecho parte del cártel de la OPEP, como país aliado.
También sobra decir que es un país en guerra, desde febrero del año pasado cuando decidió invadir a su vecino Ucrania.
Por su relevancia geoestratégica, por el hecho de que cuenta con armamento nuclear, y por el impacto económico que tiene Rusia, los riesgos globales no solamente se mantienen sino que se profundizan.
La Geoeconomía y la Geopolítica son un riesgo constante, el mundo no acaba de salir de una crisis cuando ya está inmerso en otra; a veces son tantos los riesgos que podemos decir que el planeta se acerca en ocasiones peligrosamente a la frontera de lo irreversible.
La información que sale de Rusia es todavía escasa y contradictoria, no sabemos cuál será el desenlace; lo que sí sabemos es que hay riesgos permanentes en el mundo y que son los tiempos que vivimos.