Por Claudia Bolaños
La eventual desaparición del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) ha generado una serie de posicionamientos entre las distintas fuerzas políticas, el propio Inai y asociaciones civiles.
El grupo parlamentario del PRI llamó al Ejecutivo federal a reconsiderar la desaparición del organismo y propusieron a la Secretaría de Gobernación realizar foros y mesas de trabajo para impulsar una nueva estrategia y el fortalecimiento del Conapred.
El diputado del PAN Juan Carlos Romero Hicks dijo que los órganos autónomos no son un capricho sexenal, pues están consagrados en la Constitución y son el resultado de la descentralización política.
En tanto, el PRD en la Cámara de Diputados expresó su respaldo y solidaridad al Conapred y CEAV, y lamentó la renuncia de ambas titulares.
Por su parte, el comisionado presidente del Inai, Francisco Javier Acuña Llamas, dijo que el Estado mexicano requiere de organismos constitucionales autónomos como contrapeso del poder, pues se ha evidenciado que “los autocontroles no han funcionado históricamente”.
Por su parte, el Consejo Supremo Hñahñu, que agrupa a más de un millón de indígenas, se unió al exhorto al Ejecutivo de no desaparecerlo.