Por Óscar Roa
Uno de los personajes históricos más importantes en la Independencia de México fue Fray Servando Teresa de Mier, a continuación, la relevancia de sus actos y sus siete escapes de prisión.
Doctor en filosofía y teología a los 27 años, el fraile nacido en 1765 en Monterrey, Nuevo León, tuvo su primer conflicto con las autoridades ante su postura de poner en duda la aparición de la Virgen de Guadalupe, cosa que le costó su exilio de la Nueva España y su aprisionamiento en Santander, aunque al ser trasladado a una prisión en Madrid logró escaparse. Al ser descubierto lo enviaron a la cárcel de Burgos de la cual también logró fugarse.
Con el paso del tiempo, el fraile perteneciente a la orden dominica decide moverse al clero secular en París, y a su regreso en Madrid, siendo un gran orador, expone sus discursos en favor de la Independencia de la Nueva España, acto que le valió ser encerrado por tercera vez; sin embargo, tras convencer a dos rabinos judíos de convertirse al catolicismo, el papa decidió liberarlo.
Acto seguido, el fraile convence a Xavier Mina de luchar en contra de la monarquía española y lo acompañó en esta obra; sin embargo, al llegar al puerto de Soto la Marina fue apresado una vez más por las autoridades del ejército realista, pero al ser trasladado a La Habana una vez más pudo respirar la libertad y huyó a Filadelfia.
Consumada la Independencia regresa al entonces Imperio Mexicano, del cual Fray Servando era enemigo, sobre todo de Iturbide, por lo que fue, una vez más, encarcelado; por lo tanto, el Congreso mexicano tomó cartas en el asunto consiguiendo su liberación y nombrándolo diputado por Nuevo León. Bajo estas circunstancias el emperador mexicano decide apresarlo por última ocasión en el Convento de Santo Domingo, lugar del cual logró fugarse, siendo esta su séptimo escape.
Fray Servando Teresa de Mier expresó su opinión de que nuestro país debía constituirse en una República centralista y fue uno de los firmantes de la Constitución de 1824, tomando lugar como consejero junto al primer presidente de México, Guadalupe Victoria.
Imagen: H. Congreso del estado de Nuevo León