Nación
Hace poco el DIF dio a conocer que en el país se reportó una alta incidencia de niños y adolescentes forzados a trabajar en los semáforos limpiando vidrios, vendiendo frutas o simplemente pidiendo monedas.
Ante esta situación, pidió a la población a evitar darle monedas a los menores que trabajan en las calles, pues podrían ser víctimas de explotación.
Por su parte, la Procuraduría de la Defensa de Niños, Niñas y Adolescentes encontró casos en los que menores de edad generan ingresos superiores a los 800 pesos, mismos que van a las manos del explotador o jefe de familia que obliga a los niños.
La explotación infantil o esclavitud infantil, es cuando se utiliza a niños o adolescentes para fines económicos de índole familiar u otra.
Imagen: Cuartoscuro