El Gobierno del Estado de México (Edomex) intensificó las labores de limpieza en Chalco con un despliegue de 5 mil 600 elementos y 500 vehículos.
La gobernadora del Edomex, Delfina Gómez, informó que para asistir a las cerca de 600 familias afectadas, se han brindado servicios gratuitos de asistencia médica mediante la Caravana de Salud por el Bienestar de Chalco, compuesta por 13 unidades móviles.
Baja el nivel de inundación
Delfina Gómez informó que los niveles de agua han disminuido gracias al método de retiro de taponamientos en el Colector Solidaridad. Este método utiliza un tubo con taladro direccional para perforar la capa de azolve. Las acciones incluyen:
48 máquinas para succión y limpieza
13,500 metros cuadrados de calles limpiadas
175 alcantarillas desazolvadas
229 viviendas limpiadas
500 toneladas de basura retiradas del sistema de drenaje
Albergues
En la zona crítica se han desplegado:
466 unidades, incluyendo patrullas, camiones, pick-ups, lanchas y vehículos anfibios, realizando recorridos casa por casa
Albergues que atienden a 70 personas
Un comedor comunitario
4,690 traslados realizados
Entrega de medicamentos y raciones de comida casa por casa
Labores de limpieza
Se ha dispersado un biodigestor químico en las calles inundadas para disolver la basura y prevenir brotes sanitarios. Hasta el momento, no se han reportado casos de dengue, salmonela, E. coli, difteria o hepatitis.
Para los animales de compañía y en situación de calle, se han desplegado tres brigadas especializadas con 12 médicos veterinarios, realizando 81 consultas y 260 desparasitaciones. También se ha lanzado una campaña de vacunación y se han resguardado 72 animales en centros de control canino en Valle de Chalco, Chalco, Texcoco, el Parque Ecológico “Zacango” y el Centro Integral Multiespecie del Edomex-UAEMéx en Zinacantepec, entre otras acciones.
Chalco, casi tres semanas inundada
Con el agua a más de un metro de altura, los días pasan lentos, pantanosos. Algunos vecinos dicen que son 20 días, otros 21, lo único cierto es que el agua baja, nunca más literal, a cuentagotas.
En la zona oriente del Estado de México, a un costado de la autopista México-Puebla, se encuentra un municipio heredero del salinismo. Esta región vio, en los últimos días, la peor de las inundaciones en los últimos 30 años, de acuerdo con los pobladores.
Para acceder a la colonia Culturas de México solo es posible a través de lanchas o con trajes especiales, en algunas esquinas, el nivel supera el metro de altura.
El olor a podredumbre, los moscos y la humedad hacen de la simple visita una experiencia desagradable. Muchos de los habitantes tuvieron que irse con familiares, algunos otros se quedaron por el miedo a los robos o por la imposibilidad de salir.
Los que decidieron quedarse reciben agua, alimentos y medicamentos por medio de lanchas de distintas dependencias, ya que, en 24 horas, el agua solo disminuyó alrededor de 10 centímetros.
Pero la gente ha demostrado su solidaridad, la real, no la del programa de Salinas de Gortari en los noventa. Un ejemplo es el del señor Efraín Hernández, que de manera espontánea prepara una olla diaria de arroz y una de guisado para apoyar a los vecinos y al personal de rescate «gracias a Dios, de donde soy no tenemos ese problema y hay que ser solidarios con la gente».
Así, los pobladores de Chalco tienen que continuar con su vida diaria. La señora María de Jesús Díaz Ramos, con un caminar accidentado, nos contó que a su nieto, de nueve años, le salieron verrugas por el estrés mientras su madre tiene que salir a trabajar y padecer las molestias del agua y la inseguridad.
Ella perdió temporalmente una fuente de ingresos porque el tianguis en el que vende se suspendió por la contingencia, además de que no han podido inscribir a su nieto que regresa a clases la próxima semana.