Apple decidió detener las ventas de sus codiciados relojes inteligentes, Watch Series 9 y Watch Ultra 2, luego de que la administración del presidente Joe Biden respaldara la sugerencia de la International Trade Commission (ITC) de Estados Unidos de prohibir su comercialización.
La compañía con sede en California ya había suspendido la adquisición de ambos modelos en línea desde el 21 de diciembre, extendiendo la medida tres días después a sus tiendas físicas en territorio norteamericano.
Apple refutó las acusaciones de infringir dos patentes de Masimo Corporation y Cercacor Labs. En un comunicado a TechCrunch, la empresa afirmó: "Estamos totalmente en desacuerdo con la decisión de la USITC y la orden de exclusión resultante, y estamos tomando todas las medidas para devolver el Apple Watch Series 9 y Ultra 2 a los clientes en Estados Unidos lo antes posible".
La firma, conocida por su innovación y diseño, presentó una apelación y simultáneamente trabaja en una solución de software que permita reactivar la comercialización de sus dispositivos afectados.
Es crucial destacar que la prohibición se aplica específicamente a los modelos de Apple que cuentan con sensor de oxígeno en sangre. Los consumidores aún podrán adquirir los demás productos de la marca, incluido el Apple Watch SE, en tiendas como Target o Walmart, siempre y cuando haya existencias disponibles.
Masimo también acusó a Apple de reclutar empleados con la intención de incorporar parte de su tecnología en los Apple Watch. En este complicado escenario, Apple deberá esperar un resultado favorable a su apelación, llegar a un acuerdo con Masimo o implementar una solución que permita el funcionamiento del sensor de oxígeno en sangre de manera diferente.
Foto por AFP