En 2022 hubo más mujeres trabajando pero con salarios más bajos: CIEP

La tasa de participación laboral femenina superó los niveles alcanzados durante la pandemia en el país; aunque la cifra de mujeres con empleo se recuperó, la mayoría de ellas están en un trabajo con menores ingresos y en actividades que se relacionan culturalmente con “tareas femeninas” como ventas, trabajo doméstico, labores de limpieza, preparación de alimentos y apoyo administrativo, informó el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

De acuerdo con las cifras del análisis de la CIEP, de 2019 a 2022, aumentó un 60% la cantidad de mujeres que ganan hasta un salario mínimo. En 2019, 5.7 millones de mujeres ganaron un salario mínimo, mientras que para el 2022, 9.1 millones de mujeres ganaron un salario. Las mujeres que ganaban hasta cinco salarios mínimos cayó y a finales de 2022, sólo 250 mil mujeres ganaron más de 17 mil 287 pesos al mes.

En cuanto a las actividades que realizan, aproximadamente 80% de las mujeres que trabajan es en sectores feminizados culturalmente, de este modo 13% labora en ventas en establecimientos; 12% en trabajos domésticos y otros trabajos de limpieza; 7.9% en apoyo administrativo; 7.4% en comercios en establecimientos; 6.7% en preparación de alimentos y servicios de alimentación; 5.4% son docentes; y 3.8% se dedican a cuidados personales y del hogar, indicó la CIEP.

Cabe resaltar que aunque su participación en lo laboral ha incrementado, las mujeres tienen cada vez menos tiempo libre, pues además de su participación en trabajos remunerados, mantienen cargas de cuidados que no disminuyen porque la distribución de las tareas domésticas no se hace de manera igualitaria y las responsabilidades del hogar recaen principalmente en ellas.

Según datos del CIEP, en los últimos tres meses del 2022, el 91.1% de las mujeres ocupadas dijeron que trabajan y realizan las tareas domésticas, mientras que sólo el 2.1% indicó dedicarse únicamente a su trabajo remunerado. Por otro lado, el 21% de los hombres dedica su tiempo sólo al trabajo remunerado y un 59.3% de los hombres con empleo trabaja y realiza tareas domésticas.

Esta desigualdad incluso significa una pérdida económica para México, por la baja participación de las mujeres en mercados laborales remunerados y formales, explicó la CIEP.