AFP
La insistencia en ocultar información militar ha convertido al Estado mexicano en responsable de la desaparición de 43 estudiantes de la escuela de maestros de Ayotzinapa, ocurrida en 2014, denunciaron expertos independientes que investigaron el sonado caso.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) presentó su sexto y último informe sobre sus pesquisas iniciadas en 2015 tras un acuerdo de México con la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
"El ocultamiento de esa información (...) se ha constituido en una responsabilidad del Estado en la desaparición de los jóvenes", dijo el español Carlos Beristain, uno de los expertos, al presentar el informe en rueda de prensa.
Para el GIEI es "imposible" seguir su trabajo de pesquisas ante el "ocultamiento y la insistencia en negar cosas que son obvias" de parte del Estado, agregó.
En su informe, los expertos cuestionaron nuevamente la actuación del Ejército mexicano. "No solo permitió que se dieran los ataques sino encubrió posteriormente y no facilitó la información veraz sobre lo sucedido", subrayó.
Los estudiantes desaparecieron la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014 luego de que se dirigieron al municipio de Iguala para hacerse de autobuses con los que pretendían viajar para actividades en la Ciudad de México.
"Se sigue mintiendo sobre la ausencia de información en Sedena (secretaría de la Defensa), sobre lo que pasó o sobre documentos que tuvieron sobre el posible destino de los normalistas", añadió Beristain.
La colombiana Angela Buitrago señaló de su lado que está documentada la presencia de policías y militares en el Palacio de Justicia de Iguala justo "cuando se estaban llevando a los muchachos con dirección desconocida".
Así, el GIEI concluye su mandato en medio de diferencias con el actual gobierno del izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien se había comprometido a dar pleno acceso a informes relativos al caso.
La versión oficial, que según expertos presenta numerosas "inconsistencias", apunta a que los estudiantes fueron detenidos por policías de Iguala coludidos con criminales.
El cártel Guerreros Unidos habría asesinado a los jóvenes para luego desaparecer sus cuerpos.
El GIEI fue creado en 2015 luego que familiares de los jóvenes, el gobierno mexicano y la CIDH alcanzaron un acuerdo de asistencia técnica.
Inicialmente fueron cinco integrantes, pero se retiraron el colombiano Alejandro Valencia, la guatemalteca Claudia Paz y Paz, el chileno Francisco Cox.