Golpean y matan a mujer en su departamento en Miguel Hidalgo

Laura Cristina, nació haca 31 años en Medellín, Colombia. Hace dos, llegó a la Ciudad de México. Aquí vivía en un departamento de la alcaldía Miguel Hidalgo… y ahí, la asesinaron. Su cuerpo sin vida fue hallado ayer por la mañana. Estaba semidesnuda, con un golpe en la cabeza, y tirada en el pasillo que llevaba a su recámara.

En el piso de duela de su departamento quedaron las manchas de su sangre, y sobre ellas las huellas de los zapatos de la persona que la agredió.

El homicida caminó desde el lugar en el que la dejó, caminó hasta la salida y huyó de ahí.

A pesar de que el edificio donde la asesinaron cuenta con distintas cámaras de vigilancia, y tiene ocho guardias de seguridad, nadie vio al responsable del crimen.

De acuerdo con autoridades de la Procuraduría General de Justicia de la ciudad (PGJCDMX), Laura Cristina Quintero Ovalle trabajaba como escort, y acostumbraba a llevar a sus clientes a ese departamento.

“No le gustaba ir a hoteles o salir a otros lugares. Decía que era inseguro, que le daba miedo que pudiera llegar la policía y detenerla o que alguien le hicieran algo… y mira: al final la asesinaron dentro de su propia casa”, contaba ayer Alejandra, una amiga de Laura.

Por esa misma precaución, Laura acostumbraba a realizar la mayoría de sus actividades muy cerca de su departamento en el conjunto Grand Tower, en la colonia Granada. Acudía a un gimnasio cercano, comía en restaurantes de la zona y se arreglaba las uñas y el cabello en negocios cercanos.

En 2017, Laura llegó a radicar a México. Vivía con una amiga que la invitó. Durante algún tiempo trabajó como edecán y demostradora. Después modeló un poco. Sin embargo, decía que no le alcanzaba el dinero para enviarlo a su familia en Medellín.

Fue así que comenzó a trabajar como escort. Se anunciaba en distintas páginas de internet y por medio de su cuenta personal de Twitter.

El año pasado, cuando su situación económica mejoró, se fue a vivir a ese departamento. Se lo rentaba el señor Roberto Sosa, aunque en ocasiones se retrasaba con los pagos.

Fue él, la última persona que tuvo contacto con Laura. Alrededor de las 10 de la noche del lunes, ella le llamó para pedirle una prórroga en el pago, precisamente porque había tenido algunos problemas de dinero.

En ese departamento Laura vivía sola. En ocasiones se quedaban amigas con ella. Areli Cruz era quien le ayudaba a realizar los quehaceres de la casa. Ella, relató ayer a las autoridades que iba a diario de 8:00 de la mañana a 5:00 de la tarde.

Platicó que el lunes Laura salió durante la mañana a realizar sus actividades de manera cotidiana. Por la tarde fue a comer y después recibió a tres clientes en su departamento, el 203 de la Torre B.

A la hora de su salida, Areli se despidió y dejó a Laura sentada en la sala viendo la televisión. Se despidieron como cualquier día.

Fue hasta ayer por la mañana que la mujer regresó y la halló sin vida. Estaba tirada en el pasillo, semidesnuda y con un golpe en la cabeza.

Aunque paramédicos llegaron para revisarla, ya nada pudieron hacer para ayudarla. Las autoridades analizan ya las huellas halladas en el lugar, y una serie de videos.