Jeremías Conan Ledesma, portero del Cádiz, tuvo un gesto de héroe para tratar de ayudar a un aficionado que requería ayuda médica en las gradas del Estadio Nuevo Mirandilla durante el duelo contra el Barcelona de la jornada 5 de LaLiga.
El juego se interrumpió sobre los 85 minutos cuando un aficionado necesitó asistencia médica y el guardameta fue uno de los primeros en percatarse de la situación que se vivió en el estadio Nuevo Mirandilla.
De inmediato, corrió hacia el banquillo y tomó un desfibrilador para llevarlo a toda velocidad hasta el sector donde se encontraba el hincha. El gesto fue aplaudido en las gradas y en redes sociales.
Luego de colaborar con la ayuda, Ledesma permaneció al borde de la cancha siguiendo la atención al fanático. Más jugadores se sumaron al arquero y otros se pusieron a rezar sobre el gramado en medio de un momento de verdadero suspenso.
El encuentro, que se frenó a poco del final, se mantuvo en suspenso durante más de 20 minutos con los jugadores en el campo y luego otros casi 20 minutos con los deportistas en el vestuario hasta que se decidió su reanudación casi una hora después de la suspensión.
El hombre afectado fue reanimado por un cuerpo médico y después de varios intentos lograron trasladarlo hacia un centro médico, por lo que se decidió continuar con el encuentro.
Unos minutos más tarde, los futbolistas regresaron al césped y comenzaron a realizar ejercicios de calentamiento.
Una vez que se reanudó el partido, el Barça logró aumentar su ventaja en el marcador y concretar la goleada. A los goles de Frenkie de Jong y Robert Lewandowski se le sumó el tanto convertido por Ansu Fati, quien marcó a placer tras recibir un pase del artillero polaco, y luego otro de Dembélé, quien remató de derecha para firmar el 4-0 definitivo con complicidad de Ledesma. El Cádiz asumió riesgos que fueron aprovechados por un Barcelona que encontró mucho campo para correr y liquidó el pleito.
Imagen: AFP