Columnas
Golpe a las arcas de la capital
Un duro golpe recibió el Gobierno de la Ciudad de México, luego de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que es inconstitucional el cobro del impuesto del 2% que se realiza a los trabajadores de aplicaciones que realizan entregas a domicilios. La medida ya llevaba un par de años y ahora el gobierno de Clara Brugada se verá obligado a regresar el dinero a las empresas como Uber, Rappid y Didi, entre otras más que operan. Incluso, ayer los trabajadores salieron a manifestarse a las calles de la CDMX y realizar bloqueos sobre Reforma y Circuito Interior para demandar que se les permitiera trabajar si aplicarles el cobro correspondiente. Después de cinco horas de protestas liberaron las calles.
Alistan par de periodos extraordinarios en Congreso
En el Congreso de la Ciudad de México se está cocinando la realización de un par de periodos extraordinarios, con la finalidad de sacar temas relevantes para la administración capitalina. La coordinadora de Morena en el poder legislativo local, Xóchitl Bravo, inició negociaciones con las diversas fuerzas políticas representadas con la finalidad de sacar una agenda común que les permita sacar adelante las iniciativas. Entre los temas que buscan incluir se encuentran la iniciativa para endurecer los castigos a franeleros, la salud menstrual, temas de seguridad vial, movilidad humana y participación ciudadana, principalmente.
En busca de la confianza perdida
La mandataria capitalina, Clara Brugada, y el secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez, presentaron ayer la nueva estrategia de seguridad que aplicarán en las 16 delegaciones con la finalidad de bajar los índices de inseguridad. Si bien la mandataria local dijo en el Monumento a la Revolución que desde 2019 se registra una disminución de la delincuencia, los habitantes de la urbe dicen que no es así. La medida ahora es que los policías se vayan a tocar puerta por puerta para que tengan un contacto estrecho con los habitantes y se genere la confianza, algo que está perdido. Esta acción es un refrito de lo que se ha hecho en otras delegaciones. Así es que si ve a los policías tocando su puerte, no se espante.