El Día del Maestro en México se celebra cada 15 de mayo como una forma de reconocer la labor de quienes dedican su vida a la enseñanza. Esta conmemoración fue establecida por decreto presidencial en 1917, durante el gobierno de Venustiano Carranza, y comenzó a celebrarse oficialmente un año después, en 1918. La propuesta fue presentada por los diputados Benito Ramírez y Enrique Viesca ante el Congreso de la Unión, en un contexto donde la educación pública comenzaba a consolidarse como pilar de la reconstrucción nacional tras la Revolución Mexicana.
La elección del 15 de mayo como fecha para esta celebración no fue aleatoria. Coincide con la toma de Querétaro en 1867, un acontecimiento clave que marcó el fin del Segundo Imperio Mexicano y el inicio del periodo republicano con la captura del emperador Maximiliano de Habsburgo. Este suceso representó el triunfo de los ideales republicanos, los cuales se vinculan históricamente con el impulso a la educación laica y gratuita en el país.
Además, la fecha tiene una connotación religiosa importante: el 15 de mayo también se conmemora a San Juan Bautista de La Salle, canonizado como el patrono universal de los educadores por el papa Pío XII en 1950. Fundador de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, La Salle dedicó su vida a la enseñanza de los niños pobres y revolucionó la pedagogía moderna al promover métodos educativos centrados en la disciplina y la formación integral.
Durante décadas, el Día del Maestro en México ha sido una jornada de reconocimientos, entrega de medallas a docentes con años de servicio, actos cívicos y reflexiones sobre el papel de los maestros en la transformación del país. En muchas escuelas, las clases se suspenden para rendir homenaje a los educadores, y en los medios se multiplican los mensajes de agradecimiento a quienes dedican su vida a formar a las futuras generaciones.
Aunque en los últimos años el magisterio ha enfrentado diversos desafíos, desde condiciones laborales precarias hasta reformas educativas polémicas, el papel de los docentes sigue siendo central en la estructura social. Según cifras del INEGI, en 2023 México contaba con más de 2 millones de personas dedicadas a la docencia, tanto en el sistema público como privado, en niveles desde preescolar hasta educación superior.
La conmemoración del Día del Maestro no solo honra a quienes enseñan, sino que también invita a reflexionar sobre la calidad de la educación, la dignidad del trabajo docente y el compromiso social que implica formar ciudadanos críticos y responsables. En tiempos de transformación digital, nuevas tecnologías y cambios en los modelos de enseñanza, el rol del maestro continúa siendo insustituible como guía, formador y referente ético.
A más de un siglo de su instauración, el Día del Maestro se mantiene como una fecha emblemática en México, que más allá de la ceremonia, debe servir para visibilizar la importancia de invertir en educación y en quienes la hacen posible todos los días, en condiciones muchas veces adversas.
Foto por Cuarto Oscuro