Al pronunciarse a favor de la reapertura económica, el grupo parlamentario del PRI exigió que se haga con prudencia y responsabilidad, para evitar una nueva ola de contagios, pues observan nueve riesgos al aún no haberse aplanado la curva de casos de Covid-19, así como la falta de un fundamento técnico realista podría ser criminal.
El gobierno debe ser responsable, claro y cuidadoso con la estrategia de reapertura de las actividades sociales, educativas y económicas, por el bien de las familias mexicanas y para evitar un rebrote de contagios masivos, así como un nuevo confinamiento en los hogares, tras el anuncio “la nueva normalidad”.
El primero es sobre la urgencia de realizar el mayor número de pruebas posibles, el segundo es que, ante la falta de plan integral y detallado para el regreso de actividades de las instituciones, se podría generar una percepción equivocada sobre los riesgos. El tercero es la falta de una efectiva coordinación entre el Gobierno federal y los estatales, sin partidismo ni mezquindades, para alcanzar una reactivación eficiente y realista de las actividades económicas.