Por pandemia, al alza saqueos en escuelas

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Durante el periodo de la pandemia por Covid-19 en México se han iniciado al menos 2 mil 238 investigaciones por robos y saqueos en escuelas del país, lo cual obedece a que la delincuencia incrementó su actividad en contra de inmuebles y negocios parcialmente desocupados o con horarios escalonados por la cuarentena.

Aseveró Alejandro Desfassiaux, presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial (GMSI), quien puso como ejemplo a Sonora, donde aprovechando la suspensión de actividades presenciales, ocurren, en promedio, 12 saqueos en escuelas cada día, según reportes del 911.

Dijo que de acuerdo con datos proporcionados por las fiscalías estatales y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, de marzo a septiembre del presente año suman 2 mil 338 carpetas de investigación por el saqueo en escuelas de 24 estados de la República, siendo Jalisco (465), Sonora (446), Coahuila (350), Chihuahua (254), Sinaloa (130), Puebla (112) y Ciudad de México (61) las entidades con mayor número de casos.

Otro caso que ejemplifica es el del Zoológico de San Juan de Aragón que durante la pandemia sufrió el robo de todo el sistema de cableado de una de sus subestaciones, debido a la reconfiguración de sus horarios.

Por otro lado, el Sistema Colectivo de Transporte Metro interpuso una denuncia ante la Fiscalía por el robo de cableado eléctrico en algunas instalaciones que no habían estado supervisadas correctamente, por un monto de, al menos, 4 millones de pesos.

“A raíz de lo extensa y complicada que podría resultar la pandemia, con subsecuentes oleadas de contagios, la delincuencia está apostando por blancos más fáciles, como escuelas o inmuebles desocupados de donde pueden sustraer objetos de valor para posteriormente revenderlos en el mercado negro”, afirmó el experto en seguridad.

Destacó la reestructura constante que los negocios han tenido que seguir implementando para adaptarse a las nuevas condiciones del mercado, pero también buscar estrategias de protección ante el incremento de robos en diversos giros.

Expuso que la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) ha pronosticado que al menos 50 por ciento de las empresas en el país se verán obligadas a llevar a cabo un nuevo recorte de personal antes de que acabe 2020.

Goldman Sachs prevé que el cierre de año podría llegar acompañado de un desplome económico de hasta 9.8 por ciento para el país, lo que agravaría aún más la situación.

Consideró que la inseguridad se está agravando por un problema multifactorial. En primer lugar, la delincuencia seguirá diversificando su modus operandi para “sacar ventaja” ante la nueva ola de contagios por Covid-19, que al combinarse con la influenza estacional o la gripe como indica la Secretaría de Salud, propiciarán una mayor restricción en la movilidad en entornos laborales, tal como acaba de suceder en Europa, donde nuevamente se tomaron determinaciones estrictas para la población y los negocios.

En segundo lugar, está el factor económico. La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) anunció que el Covid-19 ya es el séptimo evento más costoso en la historia del país con 466 millones de dólares, equivalente a casi 10 billones de pesos. “Ante este panorama desalentador, sería ingenuo pensar que la inseguridad no va a crecer”, subrayó el especialista.

En Alemania, por ejemplo, uno de los países que mejor habían controlado la pandemia, acaba de registrar 11 mil 287 contagios diarios, por lo que el rebrote está golpeando fuerte y, desafortunadamente, es probable que se refleje pronto una situación similar en México; teniendo en cuenta que se prevé el retorno masivo de al menos 3 millones de connacionales de Estados Unidos para finales de año.

En tercer lugar, la falta de cultura empresarial en términos de prevención del robo, aunada al trabajo remoto, los horarios escalonados, las nuevas condiciones en la forma de operar de las empresas, el aislamiento en centros educativos y recreativos genera la ventana de oportunidad perfecta para el incremento de saqueos para finales de este año, dijo Alejandro Desfassiaux.

“Es importante que tanto el sector público como el privado sean previsores en cada uno de sus ámbitos de acción y no solamente reactivos ante la intensificación de este fenómeno en nuestro país. Sería muy complicado para las empresas sobrevivir económicamente a un segundo cierre y aletargamiento de sus operaciones”, advirtió.