Por Mario Galeana
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Una semana después del fin de la Jornada Nacional de Sana Distancia, Puebla atraviesa su etapa más grave desde el arribo de la pandemia. En el último fin de semana se registraron 488 nuevos contagios, de los cuales 99 son personas en prisión, y 38 muertes más.
En promedio, las autoridades sanitarias confirman un nuevo caso de Covid-19 en Puebla cada 10 minutos y los contagios se han extendido a 134 de 217 municipios.
Ayer, en conferencia de prensa, el gobernador Miguel Barbosa Huerta informó que el regreso paulatino de actividades en el estado, programado para la tercera semana de junio, será evaluado por las autoridades sanitarias locales debido al alto pico de contagios.
“Esto es alarmante, sí, porque desencadena un conjunto de consecuencias y, desde luego, esta pandemia está en el máximo nivel de lo que teníamos registrado. Es el momento más crítico que estamos viviendo”, afirmó.
Además, atribuyó esta oleada de contagios a cierta actitud “desafiante” de un sector de la ciudadanía que, “harta del confinamiento o de la sana distancia”, ha retomado sus actividades sin precauciones frente al virus.
“Reconozco la necesidad de muchas personas de salir de su casa, pero hay otros que simple y sencillamente desafían a la enfermedad”, declaró.
CONTAGIOS EN CÁRCELES
El virus ha alcanzado también a las cárceles. Según el secretario de Gobernación (Segob) del estado, David Méndez Márquez, hay al menos 99 personas en reclusión que están contagiadas.
De éstos, 70 se encontraban recluidos en el penal de San Miguel, en la capital poblana; 15 en la cárcel de Huejotzingo, donde se detectó el primer caso activo; siete en el centro de reinserción social de Tehuacán y tres en la cárcel de Ciudad Serdán.