Variante BQ.1 de Ómicron prevalecerá en próximos meses

El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) señaló que, para mediados de noviembre y principios de diciembre, la variante BQ.1 del virus SARS-CoV-2, podría ser responsable de más del 50 por ciento de las infecciones de Covid-19, y de más del 80 por ciento para principios de 2023.

BQ.1 es una variante derivada de Ómicron y fue bautizada por los usuarios en redes sociales como “Perro del infierno”, en referencia a la mascota de Hades, dios del infamando en la mitología griega, el cual tenía como misión resguardar las puertas del infierno.

El pasado 27 de octubre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) explicó que es un sublinaje de BA.5 (Ómicron). Esta última tiene mutaciones en pico en algunos sitios antigénicos clave, pero BQ.1 porta una mutación de pico adicional que le da una ventaja de crecimiento significativa sobre otras variantes en muchos entornos, incluidos Europa y Estados Unidos.

Aunque la variante ya ha sido reportada en algunos países del mundo, la OMS advirtió que no se diferencia lo suficiente de otros linajes de Ómicron, como para justificar la designación de nuevas variantes de interés, asimismo, reiteró que en este momento no hay datos epidemiológicos que sugieran un aumento en la gravedad de la enfermedad.

Al respecto, el ECDC informó que la nueva cepa tiene la capacidad de evadir considerablemente la respuesta del sistema inmunitario. Sin embargo, la agencia de la Unión Europea ha apuntado que no hay evidencia de que provoque una mayor gravedad de la infección, en comparación con las variantes de Ómicron BA.4/BA.5.

Hasta el momento, no se han reportado casos en México. Sin embargo, autoridades sanitarias internacionales la han identificado en distintos territorios, como en países de la Unión Europea como Francia (19%), Bélgica (9 %), Irlanda (7%), los Países Bajos (6%) e Italia (5%).

Entre sus síntomas se encuentra dolor de garganta, tos, malestar general, diarrea y secreción nasal.