Por Paula Rodríguez
El pasado 21 de mayo Patricia Ripley acudió a las autoridades para denunciar que un par de hombres afroamericanos la habrían amenazado con que les entregara a su hijo de 9 años, Alejandro Ripley, mismo que padecía autismo. Cuando la policía la interrogó detectó incongruencias en su declaración y posteriormente un video en donde se percibe cuando ella misma lo arroja a un canal.
En una audiencia llevada a cabo de forma virtual, la fiscalía estatal de Miami-Dade informó que la abogada de Ripley afirmó que su defendida se declaraba inocente del cargo de asesinato en primer grado y también del cargo de asesinato premeditado.
La próxima audiencia fue fijada para el 18 de agosto del año en curso, por lo pronto Patricia continúa presa en el Centro Correccional Turner Guilford Knight, y no tiene el beneficio de libertad condicional bajo fianza en tanto que es responsable del delito de homicidio en primer grado.
En un video que circuló en internet, se aprecia el primer intento de homicidio que realizó Patricia Ripley en contra de su hijo autista de nueve años. La mujer camina con él a la orilla de un canal y posteriormente lo arroja, sin embargo minutos después regresa acompañada de un hombre y lo sacan. Una hora más tarde, en otro canal, realizó lo mismo pero esta vez no hubo alguien que acudiera en auxilio del menor.
Ripley fue detenida un día después, cuando el cadaver del pequeño fue rescatado del canal y le confesó a la policía que “él iba a estar en un lugar mejor”.
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