En un hecho sin precedentes, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezará este jueves una reunión histórica con más de 2,000 alcaldes del país para tratar temas clave como obras de infraestructura en comunidades indígenas, programas de agua y saneamiento, y estrategias para combatir la violencia, incluyendo el programa “Sí al desarme, sí a la paz”.
El encuentro, que se llevará a cabo a las 11:00 horas en el World Trade Center de la Ciudad de México, marca la primera ocasión en que una titular del Ejecutivo federal sostiene un diálogo directo con todos los presidentes municipales de México. Según Sheinbaum, esta coordinación entre los tres niveles de gobierno es "indispensable" para atender de manera integral las necesidades de la población.
En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, la mandataria subrayó la importancia de unir esfuerzos y recursos entre los gobiernos federal, estatal y municipal para implementar proyectos prioritarios de agua potable y saneamiento en las regiones que más lo necesitan. Además, anunció la creación de "programas maestros" diseñados específicamente para atender las particularidades de cada municipio o región, con el objetivo de garantizar la inclusión y el consenso en su ejecución.
Otro de los temas destacados será la atención a las causas estructurales de la violencia, abordadas a través de iniciativas como los Senderos de Paz, una propuesta gubernamental que busca fortalecer la seguridad y el tejido social en todo el país. Sheinbaum señaló que los alcaldes recibirán detalles sobre estos programas para que puedan implementarlos en sus demarcaciones.
El programa de desarme también será un punto central de la discusión. La presidenta destacó que “Sí al desarme, sí a la paz” ha demostrado ser una estrategia eficaz para reducir la violencia en comunidades vulnerables, y buscará que más municipios se sumen a esta iniciativa.
El Encuentro Nacional Municipal reunirá, además, a gobernadores, reforzando la colaboración interinstitucional como parte de una estrategia integral para mejorar la calidad de vida de los mexicanos. Este acercamiento histórico sienta un precedente en la coordinación entre los distintos niveles de gobierno y refuerza el compromiso de la administración federal con el desarrollo sostenible y la paz social.