Con facturas falsas desfalcan al sector salud con 4 mmdp 

maria.cabadas@contrareplica.mx

Un desvío de recursos por más de 4 mil 179 millones de pesos causó distintas instituciones de salud de todo el país con notas falsas, de acuerdo con una investigación realizada por las organizaciones civiles Impunidad Cero y Justicia Justa.

Ambos organismos sociales aseguraron que interpondrán las denuncias correspondientes por los delitos de defraudación fiscal, peculado, lavado de dinero y delincuencia organizada contra diversas entidades públicas y privadas.

“Es una práctica que no se limita al periodo que documentamos, es algo que se mantiene y muestra cómo operan las instituciones, no solo de salud, sino en otros sectores. Debemos exigir que se tomen medidas mucho más tajantes para detener estas prácticas”, enfatizó Denise Tron Zuccher, investigadora de Justicia Justa.

Titulado Facturas falsas: la epidemia en el sector salud, el reporte establece que de 2014 a 2019 se identificaron 22 mil 933 facturas apócrifas.

La investigación asegura que existen 837 empresas fantasmas identificadas que ya se encuentran en la lista del Sistema de Administración Tributaria (SAT), que desviaron los recursos públicos, 80 por ciento de los cuales se concentraron en 23 compañías.

Destaca que entre las instituciones de salud con mayores montos desviados se encuentran el Instituto de Salud del Estado de México, con mil 804 millones 848 mil 490 pesos; el Instituto Mexicano del Seguro Social, con 320 millones 909 mil 389 pesos; Instituto de Salud de Chiapas, 282 millones 857 mil 733 pesos; Servicios de Salud de Oaxaca, 268 millones 804 mil 875 pesos, y Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México, S.A. de C.V, 213 millones 782 mil pesos.

También se encuentran el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), con 141 millones 85 mil 163 pesos; Servicios de Salud de Puebla, 124 millones 179 mil 135 pesos; Instituto de Salud de Yucatán, 92 millones 559 mil 170 pesos, y Servicios de Salud de Sonora, con 92 millones 20 mil 865 pesos, entre otras.

Tron Zuccher señaló que en el análisis que realizaron sobre las facturas destaca el hecho de que la razón social de las empresas ficticias era: “consultoría”, “prestación de servicios”, “distribución” y “entrega” o “solo una compañía se refería a algo farmacéutico”.

“Esto facilitó el desvío de los recursos porque no hay materialidad que comprobar y es mucho más sencillo simular operaciones y servicios”, indicó.