DIRIGENCIA DE MORENA TIENE UN “DESMADRE”: GIBRÁN RAMÍREZ

Gibrán Ramírez Reyes, el candidato a presidir el partido de Morena, decidió contender por el cargo, luego de múltiples llamados a los actuales dirigentes a ordenar “todo el desmadre” que han generado dentro del partido y que han llevado a alejarse de la militancia, del presidente Andrés Manuel López Obrador y a la inacción.

En entrevista con ContraRéplica, el politólogo además calificó de injusto que diputados como Mario Delgado y Porfirio Muñoz Ledo quieran participar desde la “comodidad” de sus escaños, sin dar el peso a la dirigencia del partido.

Para este candidato, de conseguir la dirigencia nacional lo más urgente que haría, es lo que tiene que ver con el próximo proceso electoral de 2021. Lo primero es definir o generar un método confiable para tomar decisiones por las candidaturas, a través de “un poderoso” departamento de encuestas, para que no dependa de encuestadoras externas, y generarlo con profesionistas que hay desempleados, de distintas ramas, y puedan generarlas para todo el país.

Con ello las candidaturas no “estarían sujetos al acuerdo y a la cuota”, y la pelea principal sería por las candidaturas sin simulaciones.

Su segunda propuesta es unir nuevamente los vínculos de Morena con la sociedad, después de que estos dos años se cortaron y estuvo el partido ensimismado, hablando de tribunales, de cuotas, de consejos de congresos, de asambleas infiltradas y reventadas, que no le interesa a nadie, mencionó Gibrán Ramírez.

“Y también requiere reorientar la formación política, pero lo urgente es que la formación política sea prioritaria para quienes representan un cargo, pues varios tienen buena voluntad, pero no saben ser servidores públicos”, dijo.

Esta también otra propuesta; crear un observatorio de los gobiernos locales y estatales y su congruencia con los principios de la 4T y los valores de movimiento, de tal manera que quienes gobiernen mal y quienes llegaron de otros partidos asumiendo que iban a cambiar, pero no han cambiado, no tengan derecho a reelegirse ni seguir dentro del partido.