Claudia Bolaños
Diputados de Morena, PRI, PRD, Partido Verde y Movimiento Ciudadano del Congreso de la Ciudad de México, ignoraron las múltiples implicaciones de la despenalización del delito de aborto hasta el noveno mes de gestación, principalmente respecto a los riesgos a la vida de las madres y el dolor al que será sometido la niña o niño que iba a nacer, aseguró Annayancy Varas García, especialista en primera infancia.
La directora del think tank especializado en primera infancia expresó que la iniciativa de la diputada Yuriri Ayala Zuñiga, que deja abierto cometer aborto en cualquier etapa gestacional, pasa por alto el dolor del bebé por nacer, quien, de acuerdo con la investigación científica, desde el primer trimestre de gestación ya responde a estímulos de dolor.
En lugar de centrarse en proponer la ampliación del aborto, los legisladores deberían de centrar los esfuerzos de salud pública en atender la prevención de la violencia sexual y las problemáticas de fondo que vivimos actualmente las mujeres en salud, seguridad, educación y economía, expresó Varas García.
La especialista comentó que hoy se sabe que el dolor no necesariamente requiere de la conciencia adulta para generar efectos fisiológicos y de estrés en fetos y bebés prematuros; desde etapas tempranas de la gestación existen respuestas del bebé a estímulos dolorosos que se intensifican en el segundo y tercer trimestres de embarazo.
Por esta razón científica, el aborto hasta el noveno mes de embarazo significa someter al dolor para acabar con la vida de un ser humano inocente e indefenso, señalaron.
No solo eso, la mayoría de los diputados locales se muestran insensibles a la evidencia médica que advierte que el riesgo a la vida de la mujer embarazada es exponencial en casos de aborto en edad gestacional avanzada. Es claro que en el centro del debate público no es el interés principal la salud y la integridad de las mujeres de la capital del país, sino lo contrario.
Citó que de acuerdo con estudios y artículos médicos que no se tenían hace 17 años cuando se despenalizó el aborto hasta las doce semanas de gestación, ahora está demostrado con bases científicas que terminar con la vida de un ser humano próximo al parto es un proceso extremadamente cruel y riesgoso.
Es fundamental que los diputados del Congreso de la CDMX tomen en cuenta los estudios sobre la actividad neuronal en bebés en desarrollo y bebés prematuros que revelan comportamientos de estrés que son observables, lo que ha llevado a un cambio en el tratamiento del dolor en la práctica médica moderna, dijo.
Investigaciones en las últimas décadas han demostrado que los bebés en el vientre materno presentan respuestas fisiológicas significativas a estímulos dolorosos, lo cual ha impulsado una reevaluación de las prácticas médicas, agregó Varas García.
En tanto, para Onofre Zenil, médico cirujano y José Raygoza, experto en Administración de Hospitales, un aborto tolerado, incluso hasta el noveno mes de embarazo como lo propone la iniciativa de Morena es un acto insensato y hasta preocupante porque significa que personal médico debe aceptar la comisión de un crimen.
De acuerdo con especialistas médicos, esta política de despenalizar el aborto casi al final de un embarazo incrementa los riesgos de complicaciones médicas y expone a las mujeres a riesgos de salud emocional y posibles consecuencias en embarazos futuros, como nacimientos prematuros.
En el caso de la capital del país, explicaron, existe una ausencia de políticas que faciliten la atención médica y el apoyo psicológico y social desde las primeras etapas de gestación a cualquier mujer en situación de vulnerabilidad.
Así, una política que permita abortos en estas etapas no solo omite salvaguardar la vida y salud de las propias mujeres, sino que, en la práctica, representa una medida regresiva que aumenta el peligro para quienes deben estar protegidas.
Imagen: Especial