En una sesión solemne en el Congreso local, la diputada de Morena, Elizabeth Mateos, pidió a la dirigencia nacional y local del PRI que pidan perdón por la masacre ocurrida el 2 de octubre de 1968, cuando el partido estaba en el poder bajo la presidencia de Gustavo Díaz Ordaz.
"Exigimos que pidan disculpas al pueblo de México y que dejen de ofrecer palabras vacías cada año", declaró Mateos, mientras los diputados priistas presentes mostraban incomodidad.
Durante la sesión, otros legisladores también reflexionaron sobre la importancia de recordar este trágico evento.
El diputado Pablo Trejo enfatizó la relevancia de la democracia, mientras que Luisa Ledesma, de Movimiento Ciudadano, destacó el simbolismo de resistencia que representa el movimiento estudiantil de 1968, que luchó por derechos fundamentales en un contexto de represión.