Hasta la guerrilla colombiana para actividades por Covid-19

Un año después de su última tregua y con el diálogo con el gobierno colombiano congelado, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha decretado un alto el fuego unilateral “activo” de un mes por el coronavirus.

La tregua de la última guerrilla de Latinoamérica entrará en vigor el 1 de abril y concluirá el último día del mes, aunque el grupo armado se reserva el “derecho” a defenderse si sus columnas son “atacadas”.

Con 49 millones de habitantes, el presidente Iván Duque declaró el estado de emergencia y una cuarentena hasta el 13 de abril. Aún incipiente en el país, la pandemia había causado hasta ayer 702 contagios y diez muertos. El gobierno estima que el virus afectará a cuatro millones de colombianos y producirá 3,000 muertos.

“El cese es activo porque nos reservamos el derecho a defendernos ante los ataques de las fuerzas estatales, integradas por tropas regulares, paramilitares y bandas narcotraficantes en varias regiones del país”, aclaró el ELN en el comunicado mediante el cual anunció la tregua.

La organización guerrillera justifica su decisión como respuesta a la petición realizada por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, que la semana pasada hizo un llamamiento a suspender todas las guerras y conflictos del mundo para que gobiernos y grupos armados puedan centrarse en luchar contra el virus.

Junto al alto el fuego, el ELN plantea una serie de peticiones a Duque, criticando su estrategia para afrontar la pandemia y exigiendo “que el gobierno suministre de forma gratuita el test de confirmación del contagio, el material sanitario y los medicamentos para evitar la expansión del coronavirus”.

La guerrilla aprovecha la tregua para pedir a Duque que se retomen las negociaciones de paz entre el gobierno y los representantes de la organización que se encuentran en Cuba. El mandatario suspendió el diálogo después del coche bomba del 17 de enero del año pasado contra la Escuela de la Policía de Bogotá, que causó 22 fallecidos y 66 heridos. A pesar de todo, el grupo marxista-leninista decretó una tregua unilateral durante la última Semana Santa.

Duque ha reiterado que, para continuar las negociaciones, el ELN debe liberar primero a todas las personas que mantiene secuestradas. Tras la disolución de las FARC, el gobierno colombiano inició las negociaciones con el ELN en febrero del 2017 en Quito, y al año siguiente fueron trasladadas a La Habana, donde aún se encuentran los representantes de la guerrilla.