Hipódromo de las Américas sufre declive laboral

Jinetes del Hipódromo de Las Américas lamentaron el declive de su situación laboral, con el nuevo concesionario de este lugar, así como del resto de caballistas y empleados que piden la presencia de la Secretaría de Gobernación e incluso de la de Hacienda, y de la Secretaría del trabajo para verificar las diferentes problemáticas que enfrentan.

Señalaron la falta de capacitación de los encargados de mandos del Hipódromo, como el gerente de Operación Hípica que antes era el encargado de seguridad.

En entrevista con este medio mencionaron que hay irregularidad en el descuento de impuestos que en algunos casos ha sido excesivo, como en la entrega de aguinaldos.

Por ello, pidieron la presencia de la Secretaría del trabajo Luisa María Alcalde, pues son constantemente amenazados.

"Aquí ya hemos tenido incluso un deceso en el que un caballista murió al caer y le pasó una llanta de un tractor por la cabeza", por malas condiciones del terreno y de equipo de seguridad de calidad.

En esa ocasión había carreras, y no fueron suspendidas para poder atender el tema del trabajador muerto, incluso se intentó impedir el paso del Ministerio Público Para no afectar el negocio, aseguraron.

Indicaron que les falta equipo de seguridad, como chalecos, cascos y botas qué les tendrían que dar dos al año.

Y jinetes consultados mencionaron que además, la pista cuente con las condiciones necesarias, pues hay hoyos en el piso que ponen en riesgo a los caballos, y por supuesto la vida de ellos.

Lo que necesitamos es la presencia de las autoridades, pues son muchas las irregularidades y el abandono que hay en el hipódromo, sin que la Dirección de juegos y sorteos, de la Secretaría de Gobernación mandé a verificadores, bajo el argumento de que casi no tienen personal.

"También hacemos un llamado a María Luisa alcalde la Secretaria, porque aunque tenemos un sindicato este es 'charro', no nos ayuda, me defiende y solo ha utilizado los espacios para meter a sus familiares".

En el hipódromo hay muchas zonas donde faltan luminarias, en el área de baños no se cuenta con el servicio de vapor siempre, lo cual es una situación indispensable para los jinetes, para que suden el exceso de peso que pudieran tener y no sean sancionados, las cuales se han incrementado pese a la falta de trabajo.

Hasta ahora no hay fecha para la nueva temporada de carreras, lo cual afecta a ellos y a los propietarios de los caballos, varios de los cuales han decidido dejar el negocio tras uno o dos años de pérdidas.

Los jockeys antes muy reconocidos y admirados, no forman parte de el personal del hipódromo sino que son independientes. Son 60, y su seguro social lo tienen que pagar ellos, ya sea de manera individual o al meterse en una cuadra, integrada por varios.

Para contar con alguna ayuda es que ellos organizaron un fondo para cuando lo requieran, a través de una asociación a la que pertenecen.

Indican que cuentan con espacios para descansar en los que muchas veces no tienen ni siquiera luz y las cobijas ni siquiera se les lavan.

Un grave problema es que no cuentan con servicios médicos especializados, por lo que es importante que se supervise los servicios de la empresa Codere misma que obtuvo por segunda ocasión, y de manera opaca y adelantada, la concesión del Hipódromo de Las Américas.