Un juez federal en Rhode Island emitió una orden de restricción preliminar que bloquea indefinidamente la intención de la administración del presidente Donald Trump de congelar subvenciones y préstamos federales, que podrían ascender a miles de millones de dólares. Esta medida responde a una demanda presentada por casi dos docenas de estados demócratas, quienes argumentaron que la pausa en el gasto federal generaría confusión y afectaría servicios esenciales en todo el país.
El juez John McConnell Jr., encargado del caso, afirmó en su fallo que el poder ejecutivo intentaba colocarse por encima del Congreso, lo que "socava los distintos roles constitucionales de cada rama de nuestro gobierno". McConnell subrayó que el Ejecutivo no presentó ninguna autoridad constitucional o legal que le permitiera imponer una congelación de fondos de tal magnitud. Además, destacó que esta acción indiscriminada afectaría negativamente la capacidad de los estados para administrar servicios vitales a sus residentes.
El fiscal general de Rhode Island, Peter Neronha, celebró la decisión judicial, señalando que "no tenemos reyes en este país, y la orden de restricción preliminar de hoy reafirma eso". Neronha criticó la intención del presidente Trump de socavar el Estado de Derecho en favor de un poder ejecutivo ilegal, y enfatizó que los estadounidenses pagan impuestos esperando que el Congreso asigne esos recursos a agencias y programas que los apoyen en su vida diaria.
Esta no es la primera vez que la administración Trump enfrenta obstáculos legales en sus intentos de reestructurar el gasto federal. Recientemente, el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó una solicitud de emergencia para congelar casi 2.000 millones de dólares en ayuda exterior, representando un revés significativo para la ofensiva de recorte de gasto del gobierno. En una decisión dividida de 5 a 4, el tribunal respaldó una orden judicial que requería la liberación inmediata de los fondos a contratistas y beneficiarios de subvenciones de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y el Departamento de Estado.