La regulación de la inteligencia artificial en México

Otra de las ventajas que tiene la IA es la precisión, que es un elemento importante cuando se trata de optimizar tareas o la presentación de datos con extrema eficiencia; lo que contribuye además a que las personas que la utilizan puedan incrementar su creatividad y la toma de decisiones, al analizar y ejecutar tareas difíciles en muy poco tiempo y contar con resultados que faciliten la conducción de un proyecto.

Sin embargo, como la gran mayoría de las cosas en la vida, la IA también tiene factores en contra que tienen que ver con su característica de invención humana y es que va a ser sujeta de actualizaciones para ir perfeccionando su funcionamiento; lo cual resulta actualmente, en costos de producción elevados, puesto que no hay muchos profesionistas especializados en su desarrollo.

Actualmente hay una preocupación mundial entorno al uso y desarrollo de la inteligencia artificial, incluso famosos creadores de tecnología como Bill Gates y Elon Musk, entre otros más han firmado una carta solicitando que se deje de utilizar y que no se siga mejorando, puesto que puede resultar en un grave riesgo para la humanidad. Los argumentos que dan son que no hay una regulación que se enfoque en el uso que se le dé y en las aptitudes éticas de las personas que la manipulen.

Las y los legisladores mexicanos podrían ser pioneros en la redacción de una ley que regule la creación, desarrollo, utilización e implicaciones de la IA dentro del territorio mexicano, especialmente por cuanto hace a la perspectiva moral pues este algoritmo carece de la capacidad para distinguir entre el bien y el mal, ya que únicamente se limitan a realizar la tarea para la que han sido programadas.

Por ello, las acciones que realicen dependen directamente de las y los programadores que creen el código de su funcionamiento, el cual sí puede y debe ser sometido a juicios de valor que siempre velen por el interés público, aún y cuando medie un beneficio económico privado.

Por el lado del derecho social, la inteligencia artificial, también atenta en contra de algunas profesiones y técnicas, razón por la cual, se tiene que privilegiar el trabajo humano sobre el trabajo de las máquinas, recordando en todo momento que la IA fue creada como una herramienta para facilitar las labores humanas e incluso debe ser vista dentro de la materia de los derechos humanos, como facilitadora del trabajo para poder garantizar una vida digna y el derecho al descanso de cualquier persona.

Así que hay mucho trabajo legal que hacer, no solo en México sino en el mundo. ¡Manos a la obra!