Más de 58 mil nicaraguenses, repatriados

Más de 58 mil nicaragüenses han optado por la repatriación luego de quedar varados en diferentes países del mundo, como consecuencia de la pandemia del coronavirus, informó ayer el gobierno de Nicaragua.

En total son 58 mil 94 nicaragüenses, entre ellos 37 mil 254 varones y 20 mil 840 mujeres, los que han decidido regresar a su país, luego de perder sus medios de vida en el extranjero, según un informe divulgado por el Ministerio de Gobernación de Nicaragua.

El dato fue actualizado el sábado en la noche, luego de que un grupo de 256 personas originarias de Nicaragua que estaban varadas en Panamá, retornaron a su país, en el marco de un acuerdo entre ambas naciones con Costa Rica, para permitirles el traslado en medio de las restricciones fronterizas internacionales.

Las autoridades confirmaron que los nicaragüenses fueron aceptados en su país, luego de cumplir con los requisitos locales, entre los que destaca la prueba de Covid-19 negativa y garantizar que del Gobierno del presidente Daniel Ortega no incurrirá en los gastos de repatriación.

Al grupo proveniente de Panamá se le “realizó revisión rigurosa para descartar fiebre o síntomas respiratorios relacionados al Covid-19, y estará verificando cuarentena de 14 días en sus domicilios”, según el Ministerio de Salud.

En los últimos tres días Nicaragua ha recibido 695 nacionales varados, indicó el Ministerio de Gobernación, que no especificó los países de procedencia.

Hasta mediados de esta semana se creía que la cantidad de nicaragüenses varados en el mundo a causa de la pandemia, y a quienes el Gobierno impedía su ingreso, rondaba los 3 mil.

La situación de los nicaragüenses sin medios para vivir en el exterior era desconocida hasta que, en junio pasado, un grupo de 93 marineros que se mantenían varados en un crucero en el mar Caribe, enviaron un vídeo en el que aparecían sosteniendo un enorme cartel dirigido a Ortega con la frase “Somos nicas, déjenos entrar”.

Múltiples denuncias sobre nicaragüenses viviendo a la intemperie y alimentándose de la caridad desde abril por el rechazo de sus autoridades, hicieron que Ortega permitiera lo que denomina “ingreso ordenado y seguro”.

Para facilitar el proceso, países como Costa Rica, Guatemala, Honduras y Panamá, así como ONG, han asumido los costos de la repatriación de los nicaragüenses.